“La cantidad de víctimas del tabaco supera a los fallecidos por accidentes viales, tuberculosis, suicidios y HIV», subrayó el médico, quien insistió con que el número de muertos por año por culpa del tabaquismo llega a los 40 mil.
En ese sentido, detalló que “por la combustión, el tabaco se transforma en monóxido de carbono, y es especialmente perjudicial en las embarazadas, pues padecen abortos, cuando se adhiere a la hemoglobina deja de transportar oxígeno». «Está comprobado que tiene influencia en las denominadas muertes súbitas del recién nacido. La nicotina y el monóxido de carbono traspasan la placenta y llega al bebé, y es como si el bebé estuviera fumando», remarcó.
«El tabaco es una adicción, no es un vicio, y uno entra en la trampa que le tiende la tabacalera; suele ser muy difícil salir y se requiere de la participación del Estado en campañas antitabáquicas, con fuerte presencia en los medios», apuntó.
“Siempre es oportuno dejar de fumar, la posibilidad de tener un cáncer se reduce a medida que transcurre el tiempo en el cual se abandonó el cigarrillo», dijo Sirna, quien indicó que «ara dejar de fumar existen drogas que facilitan ayudar a los fumadores, como la bareniclina, con buenos resultados».