Según su testimonio ante los jueces (reproducido hoy por varios periódicos italianos y por el diario El Mundo de España), las muchachas que después de participar en las orgías de «Il Cavaliere» regresaban a su hotel a pasar la noche sólo recibían los gastos correspondientes a los billetes de avión y el alojamiento. En cambio, aquellas que pasaban la noche en compañía del primer ministro eran recompensadas con un bono de 1.000 euros. «Pero Berlusconi no sabía que yo pagaba a las chicas», precisó.
Tarantini dio los nombres de varias de las jovencitas que llevó a las fiestas del primer ministro italiano, y entre las que se encuentran actrices, modelos, relaciones públicas y también prostitutas. Y también señaló los nombres de algunas de las que recibieron los 1.000 euros por pasar la noche en compañía de Berlusconi, incluida Patrizia D’ Addario.
«Quería conocer a Berlusconi, y con ese objetivo he incurrido en gastos enormes para poder intimar con él. Conociendo su interés hacia el género femenino, lo que hice fue llevarle chicas que le presentaba como mis amigas, ocultándole que a veces las retribuía. Sólo le pedí que me presentará a Guido Bertolaso, el responsable de Protección Civil, dado que quería que un amigo mío pudiera exponer a éste las virtudes de su grupo industrial a fin de poder trabajar con Protección Civil», relató el empresario ante los jueces.
Aeronoticias considera resaltar que según sostuvo, Tarantini logró en parte su objetivo: «Una tarde, Berlusconi me presentó a Guido Bertolaso, con el que posteriormente me reuní junto a mi amigo, el empresario Enrico Intini. Pero después no pasó nada más».