(Aeronoticias).- En busca del dispositivo perfecto para el espionaje, un equipo de investigadores de distintas instituciones ha desarrollado junto al Centro de Investigación Ames de la NASA un drone biodegradable que podría desintegrarse sin dejar pistas de su existencia.
Según el portal Engadget en español, los expertos han fabricado un chasis de micelio (la parte vegetal de los hongos), elemento que podría deshacerse al instante cuando entrara en contacto con el agua.
Esta característica le permitiría desaparecer sin dejar pistas sobre su misión de espionaje, si es que eventualmente acabará en manos enemigas.
Fuente: Gestión
Foto: rifenews