«Sí estamos viendo más casos en la última semana en algunos estados, lo que ha motivado ya cierres de escuelas», dijo el funcionario que, sin embargo, aseguró que la situación no parece tan grave como la registrada a finales de abril, cuando se anunció la presencia de un nuevo virus y que por algunos días llevó a semiparalizar las actividades del país. Para la temporada invernal, Córdova había estimado hasta un millón de contagiados, aunque ahora dijo que podría llegar a cinco millones o incluso un poco más en un país de casi 107 millones de habitantes.
Sobre el pronóstico de fallecimientos, el secretario dijo que «esperamos poder contener la mortalidad, que no rebase los 2.000 pacientes en total en toda esta época… de septiembre a marzo». Hasta el lunes, la Secretaría de Salud había reportado 25.214 casos de influenza A H1N1, de los cuales 217 habían fallecido. Aunque los 32 estados del país se tienen casos confirmados, en los últimos días se ha visto un repunte en estados del centro y norte del país, donde han anunciado el cierre de escuelas.
Córdova dijo que el gobierno negocia con empresas para recibir hacia finales de octubre un primer lote de vacunas contra el virus, que serán destinadas inicialmente al personal médico. Refirió que conforme a una directriz de la Organización Mundial de la Salud, desde hace un par de meses sólo se toman muestras de 30% de los casos sospechosos, por lo cual es posible que las actuales cifras sean al menos el triple de las reportadas.