Y luego, de que el último domingo se probaron los misiles de corto alcance y durante la noche los Shahab-2. Según informó el general de brigada de la Guardia Revolucionaria, Hossein Salami, los objetivos estaban a entre 300 y 700 kilómetros. Las pruebas fueron exitosas. Los Shahab-3 son la tercera tanda de pruebas y la última.
Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Teherán subrayó entretanto que no hay relación entre las pruebas de misiles y la construcción de una segunda planta de enriquecimiento de uranio. Se trata, insistió, de pruebas anuales en el marco de unas maniobras para analizar la capacidad de defensa del país.
Aeronoticias considera subrayar que la construcción de la segunda planta de enriquecimiento de uranio se conoció la semana pasada y generó gran inquietud a nivel internacional. Se teme que el país islámico aspire a construir bombas atómicas. Irán sostiene que el material nuclear es sólo para fines civiles.