(Aeronoticias) La ética profesional es la esencia misma de la abogacía y la construcción de una doctrina ética al servicio del prestigio del Ilustre Colegio de Abogados de Lima, es una tarea que tendrá que construir el nuevo Consejo de Ética que los Delegados del CAL tendrán que nombran a fines de febrero del 2016.
Debemos recordar, que la abogacía peruana atraviesa por una severa crisis de credibilidad porque la función deontológica no funciona, por ejemplo los abogados sancionados por el Colegio de Abogados de Lima se matriculan en el Colegio de Abogados del Callao para incumplir la sanción del Tribunal de Honor del CAL y seguir ejerciendo y cuando los detectan, como es el caso de Víctor Octavio Girao Alatrista, que se colegian ilícitamente en el Callao, se incorporan al Colegio de Abogados de Huancavelica, lo cual lógicamente demuestra la vulnerabilidad del sistema y la poca credibilidad que la sociedad le otorga a la abogacía porque la Junta de Decanos de los Colegios de Abogados del Perú está prácticamente de adorno.
Un abogado líder del pensamiento anticorrupción del Ilustre Colegio de Abogados de Lima es Yuri Iván Zuñiga Castro, que en las últimas elecciones defendiendo el honor de la abogacía peruana, presentó tacha contra 2 de los candidatos al Decanato, uno de los cuales cuando fue Director de Economía en el 2013 había contratado con las empresas de sus familiares, otorgándole contratos por cientos de miles de dólares que aún permanece sin sanción ética.
Consideramos que los nuevos Delegados del Colegio de Abogados de Lima por consenso deberán darle la confianza y elegir a Yuri Iván Zuñiga Castro como Consejero de Ética 2016-2018.