(Aeronoticias) Inmarsat, el principal proveedor en el mundo de servicios de comunicación global móvil por satélite, dio a conocer un plan general a detalle y largo plazo para la banda ancha en el ámbito de la aviación, mediante el cual se garantiza que se responderá a la creciente demanda por conectividad global, rápida y confiable, por parte de pasajeros en vuelo durante los próximos cinco años.
El lanzamiento de Global Xpress (GX) Aviation de Inmarsat este año es la primera solución en el mundo que brinda conectividad de alta velocidad para pasajeros en pleno vuelo, con cobertura global ininterrumpida de punta a punta y entregada a través de un solo operador. Basada en ingeniería que satisface las necesidades de los complejos y cambiantes sistemas de rutas de las aerolíneas, los primeros clientes de la solución incluirán a Lufthansa, Singapore Airlines y Jazeera Airways.
La red GX, que entró en servicio comercialmente el pasado diciembre de 2015 y que actualmente incluye tres potentes satélites en la banda Ka, brindará la capacidad de ancho de banda internacional necesaria para atender la demanda actual y a corto plazo de las aerolíneas. Además, como parte del detallado plan de banda ancha en la aviación, también proporciona una base de cobertura global sobre la cual se irá construyendo para satisfacer la demanda esperada a futuro.
Por otro lado, Inmarsat ya se comprometió con un cuarto satélite GX, cuya construcción está por concluir y para el cual arrancan pruebas con Boeing que proporcionará mayor capacidad a la red. También la compañía le otorgó a Airbus Defence and Space un contrato para construir los primeros dos satélites en su flota de sexta generación, el primero de los cuales está programado para entregarse hacia 2020. De manera singular para Inmarsat, la nueva flota incluirá doble carga útil y cada satélite podrá respaldar servicios de la banda Ka y de la banda L. Según los servicios y demanda existentes, la co-carga útil de la banda Ka aumentará la capacidad de la red GX sobre aquellas regiones y rutas de mayor movimiento, mientras que la capacidad de la banda L, respaldará una nueva generación de servicios de seguridad en la aviación.
En el plan anunciado, otro componente vital es la Red Europea de Aviación (en inglés EAN) de Inmarsat, que será la primera solución de conectividad de pasajeros aéreos en todo el espacio aéreo europeo que integre una red satelital de avanzada y una red terrestre basada en LTE, ésta operada por Deutsche Telekom. Los aviones cambiarán automáticamente entre la conectividad satelital y terrestre utilizando un comunicador de redes a bordo, que garantice la entrega de un servicio óptimo. Las primeras pruebas comerciales de la EAN están programadas para mediados de 2017.
En torno a la noticia, Leo Mondale, presidente de Inmarsat Aviation, comentó: “el enfoque de Inmarsat en la movilidad global es realmente singular en la industria y nuestro plan para el sector de la aviación garantizará que nos adelantemos a la demanda, con la posibilidad de mover capacidad eficientemente donde y cuando sea necesario. Resultado de ello, nuestros clientes pasajeros se beneficiarán de entrar en alianza con un proveedor de conectividad sumamente enfocado, que invierte permanentemente, con la finalidad de cumplir con las necesidades de largo plazo de la industria de la aviación y garantizar un desempeño realmente superior rentablemente.
“Se trata de una medida muy importante, ya que las líneas aéreas operan complejas redes de rutas que siempre van cambiando, y cada una tiene sus necesidades particulares. Necesitan ver mucho más allá de la respuesta a corto plazo hacia la banda ancha en vuelo. El compromiso asumido por parte de Inmarsat por ir desarrollando sus cargas útiles en GX, además de la Red Europea de Aviación, subraya el hecho de que tenemos la infraestructura, el enfoque y el poder de invertir necesarios para brindar lo último en conectividad en la industria de la aviación, hoy y hacia el futuro”.
Las aerolíneas se conectarán a GX Aviation a través de nuevas terminales exclusivas JetWave, producidas por Honeywell Aerospace, socios de Inmarsat. Más de 300 aviones de pasajeros ya se han comprometido a instalar el sistema y se espera que más se apunten para ello. Actualmente también se está llevando a cabo la certificación de JetWave en 26 distintos modelos de aeronaves en los mercados de aviación comercial y de negocios, así como el de gobierno y en meses recientes, se obtuvo la aprobación para los equipos modelo Boeing 757 y Bombardier 5000 y 6000.
Para ello, se están realizando pruebas finales tanto en tierra como en vuelo, y los resultados iniciales validan exitosamente la capacidad que suministra GX Aviation de entregar conectividad de banda ancha de alta velocidad para respaldar actividades como streaming de videos y radio en vivo, video llamadas conferencia en línea, descargas de múltiples archivos y mucho más, sobre mar y tierra.
Por otra parte, Inmarsat también está colaborando con Honeywell Aerospace y Kymeta, una compañía que desarrolla innovadoras antenas de pantalla plana para la comunicación satelital con el fin de producir una antena inalámbrica de mayor velocidad en la banda Ka. La antena de aviación, exclusiva de Inmarsat, contará con capacidades únicas que propiciarán otro cambio en cuanto a conectividad con mayor velocidad y mejor calidad en los servicios de banda ancha de la aeronave. Asimismo, gracias a su ligero diseño de pantalla plana, se reduce el peso y arrastre de la aeronave, que a su vez, baja costos de combustible y mantenimiento.
“Nuestra solución totalmente integral, que incluye la red satelital y terrestre, más el hardware y la infraestructura, fue desarrollada mediante ingeniería con la plena movilidad en mente. Como somos operadores de una sola red, podemos comprometernos a ofrecer servicio mundial confiable, de gran calidad uniforme”, agregó el ejecutivo.
