(Aeronoticias) La fiesta podría haber terminado para las aerolíneas ahora que los temores sobre el terrorismo han regresado debido al ataque en Orlando.
Delta, JetBlue, American Airlines y otras grandes compañías estadounidenses habían sido premiadas en Wall Street durante los últimos años gracias a la mayor demanda de viajeros de negocios y de ocio, a un impulso en sus ingresos proveniente todos esos molestos cargos extra y, por supuesto, a los bajos precios del petróleo.
Esa combinación generó grandes ganancias para una industria que a menudo tenía problemas para generar beneficios debido a las guerras de tarifas y a los mayores costos del combustible.
Pero la mayoría de las principales acciones de aerolíneas han caído considerablemente este año.
El aumento de los precios de los combustibles les ha perjudicado, aunque algunas compañías tienen coberturas de combustible previstas para mitigar el impacto de la volatilidad en el mercado del petróleo.
La industria también podría haber añadido demasiados vuelos y ahora necesita hacer recortes. JetBlue dijo recientemente que reduciría su capacidad durante el resto del año. Las preocupaciones por el virus del Zika tampoco han ayudado.
Y ahora, el terrorismo es una vez más una preocupación legítima. Las acciones de las aerolíneas han sufrido un gran golpe esta semana después de la tragedia en el club nocturno Pulse en Orlando, uno de los destinos turísticos más populares del mundo.
Es demasiado pronto para decir si el ataque en Orlando afectará los viajes a Florida, o hacia otros lugares en todo caso.
Pero este es un vistazo al mal desempeño de las principales compañías aéreas en lo que va del año.
American: -31%
United: -27%
Delta: -25%
JetBlue: -28%
Alaska Air: -25%
Southwest: -8%
Las únicas acciones de las aerolíneas estadounidenses que se están desempeñando razonablemente bien son el operador de tarifa superbaja/sin amenidades Spirit, que ha subido 5%, y Virgin America, que ha ganado más de 55% porque está siendo comprada por Alaska Air.
Las aerolíneas internacionales también han sido duramente golpeadas por la economía global débil. Los gigantes europeos Ryanair y Lufthansa, así como la asiática Cathay Pacific y China Southern, han caído más de 10% este año.
Esta es una mala noticia para cualquier persona que invierta en acciones de aerolíneas. Pero es música para los oídos de los viajeros. Las tarifas han bajado de manera general últimamente. Las aerolíneas incluso están retirando algunos de esos cargos extra.
A pesar de que las grandes aerolíneas se dan cuenta de que no pueden repetir los pecados del pasado sin pagar un precio financiero considerable, también saben que deben hacer todo lo posible para conseguir traseros para esos asientos cada vez más pequeños.
Delta, American y JetBlue han reportado declives en una medida llamada ingreso por pasajero por milla de asiento disponible, o PRASM, por sus siglas en inglés. El PRASM es una medida de tarifas muy observada en la industria.
La caída continua muestra que las aerolíneas tienen poco poder de fijación de precios.
De nuevo, eso es genial si no has reservado tus vacaciones de verano todavía. Pero es terrible para la industria de las aerolíneas que de repente se encuentra en un poco en picada.
Fuente: CNN