(Aeronoticias) La frase abrocharse el cinturón de seguridad durante el vuelo solo puede significar una cosa, turbulencias. Más que un simple inconveniente aéreo, esta molestia de los cielos puede hacer que volar sea una experiencia traumática, especialmente para aquellos que les da miedo. Desafortunadamente, los científicos creen que las turbulencias del aire solo empeorarán, y es probable que se vean afectadas por el cambio climático. Parece como si estuviéramos en un paseo lleno de baches, por tanto ¿qué se puede hacer?
El problema actual con las turbulencias del aire limpio es que es imposible ver, detectar en el radar o predecir. Sin embargo, la nueva compañía japonesa, JAXA (Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón), planea resolver este problema a través de la última tecnología láser, que permitirá a los pilotos detectar turbulencias de aire despejado hasta 10 millas de distancia. Existen planes para probar este equipo láser en un jet Boeing 777, como parte del programa ecoDemonstrate del fabricante del avión a principios de 2018.
¿Cómo funcionará esta tecnología anti-turbulencia? En términos simples, un láser se proyecta hacia el cielo por delante de la trayectoria del avión y, mediante el uso de sensores, el software podrá analizar las velocidades de las partículas en el aire y detectar si la turbulencia está presente hasta 10 millas de distancia. Esto puede no ser una gran distancia a la velocidad de viaje, pero de este modo, el piloto tendría tiempo para reaccionar y modificar la ruta o en el peor de los casos advirtió a la tripulación de cabina y a los pasajeros que se preparen para un bache.
Si el proyecto tiene éxito, esta tecnología láser podrá ser utilizada en vuelos comerciales en los próximos años, haciendo que las turbulencias sean cosas del pasado. Pero hasta entonces tendrás que agarrarte a un lado de tu silla, mantener tu cinturón de seguridad abrochado y esperar a que pasen las turbulencias.
Fuente: EasyViajar