(Aeronoticias).- Daxing es el nombre del aeropuerto internacional más grande del mundo, inaugurado a fines de septiembre de 2019, con una superficie de 700.000 metros cuadrados (algo así como 98 canchas de fútbol).
Está ubicado a 46 kilómetros al sur del centro de Beijing. Para hacerse una idea, el nuevo proyecto de ampliación del aeropuerto Pudahuel tendrá 175.000 metros cuadrados, proyectando su inauguración en 2021.
En la actualidad, la infraestructura se encuentra bajo alerta en todas sus dependencias para hacer frente al Covid-19, con una disminución de pasajeros proyectados, reforzamiento de controles sanitarios y policiales, pero con todos los avances que lo distinguen como uno de los aeropuertos más grande y moderno del planeta.
El terminal chino es una estructura imponente y armónica, como sacada de una película futurista. Su construcción comenzó en diciembre de 2014 y en ella participaron más de 40.000 personas que lograron terminar el gigante en apenas cinco años, completando el proceso durante el pasado 2019. Su capacidad llegará en 2040 a 100 millones de pasajeros al año, hoy puede atender a “solo” 45 millones.
Verlo desde las alturas es similar a observar una delgada estrella marina de seis puntas y, aún así, es complejo describirlo. Aunque no lo crea, debido a su extensión, desde que pasas los controles de seguridad, puedes llegar a cualquier puerta de embarque en solo seis minutos. El estilo arquitectónico responde al tradicional chino que moldea e interconecta espacios que confluyen a un espacio central.
La sublime obra, que cuenta con áreas separadas para viajes internacionales y domésticos, costó US$ 11.500 millones y fue diseñada por los franceses Groupe ADP y la colaboración de la arquitecta iraquí Zaha Hadid, quien falleció en 2016, sin alcanzar a ver los resultados finales.
La iluminación del recinto es un plan de ingeniería magistral. Sólo para el exterior se requirieron más de 2.400 proyectores de la afamada marca europea Performance in Lighting. En el interior, en tanto, cada zona es especial; por ejemplo, las zonas de descanso tienen una luz tenue, mientras que las de lectura son más radiantes para garantizar la comodidad de cada usuario. Aparte, existe una serie de tragaluces impresionantes que reflejan su luz durante el día.
El aeropuerto cuenta con siete pisos, dos de ellos subterráneos que conectan con una enorme estación intermodal en la que confluyen el metro, los trenes de acercamiento regionales y los trenes de alta velocidad (que viajan a 250 kilómetros por hora). Al tomar este último, se puede llegar al centro de la capital de China en apenas 20 minutos.
Reconocimiento facial
Cuando hablamos de “futurista”, queremos decir verdaderamente futurista. Así lo demuestra una alianza entre China Eastern Airlines y el proveedor de servicios de telecomunicaciones China Unicom, quienes decidieron implementar dos elementos que, si estuviéramos en los ‘80, nos trasladarían directamente a una escena de la película Blade Runner.
¿Recuerdan, los fanáticos, ese momento en que Rick Deckard (interpretado por Harrison Ford) escanea los ojos de Rachael (Sean Young), la replicante, para detectar si es humana o no?
Bueno, esta tecnología funciona de manera similar para identificar si eres la persona que corresponde a los datos del pasaporte que estás presentando.
El gran avance tecnológico corresponde a la mezcla de tecnología 5G con gafas inteligentes de realidad aumentada. La unión de ambos elementos hace posible que tu experiencia de viaje sea totalmente expedita.
Para entender. La red 5G desplegada por China Unicom permite alcanzar, en promedio, una velocidad de descarga de datos de 1,2 GB por segundo. La velocidad de carga, en tanto, se acerca a 1 GB. Esto, conectado a las gafas inteligentes, hace posible que los trabajadores de la aerolínea realicen de forma instantánea su labor con los usuarios del servicio.
Por ejemplo, para hacer el check-in ya no es necesario entregar el pasaporte a los asistentes de vuelo, sólo basta con mirarlos directo a los ojos para que sus gafas puedan analizar tu rostro y darte acceso directo a la puerta de embarque, siempre y cuando tus rasgos faciales coincidan con la de los datos almacenados en la nube. Se estima que pasan cuatro pasajeros por minuto.
En Daxing, además, existen cámaras de vigilancias conectadas a la misma red 5G, las cuales pueden monitorear en tu Smartphone el estado de tu equipaje en tiempo real, de modo que si captas un error, este es rápidamente reportado al personal del aeropuerto. O bien hacer uso de la tarjeta electrónica que conecta tu equipaje con tu teléfono. Es decir, promete terminar con el molesto extravío de equipaje.
La tecnología de reconocimiento facial en Daxing es, sin exagerar, omnipresente. También existen escáneres faciales que permiten, entre otras cosas, hacer compras en el duty free sólo acercando tu cara a esos elementos, ahorrándote el proceso de deslizar una tarjeta o sacar el efectivo. Para recorrer, si tienes tiempo, cuenta con cinco plantas de restaurantes, tiendas, mostradores de las aerolíneas y una gran cantidad de servicios para los viajeros.
Una posdata que te puede interesar, aunque de seguro hay más que quedan en el tintero: los estacionamientos del terminal aéreo son robotizados.
Fuente: La Tercera.
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