«Jugó mejor que yo», dijo Nadal, primer cabeza de serie en el torneo chino. «Pero así es el tenis. Seguro que volveré el año que viene para intentarlo de nuevo y ganar aquí». Nadal, que también estuvo mucho tiempo fuera de las canchas por lesión, ganó su último título en el torneo de Roma, en mayo. Shanghai era sólo su segundo torneo tras estar un mes parado por dolores en el abdomen.
De hecho, durante los últimos meses, el ex número uno estuvo muchas semanas sin jugar por lesión. Tras su derrota en los octavos de final de Roland Garros, tuvo que renunciar a defender su título de Wimbledon por problemas en las rodillas. La lesión le tuvo fuera de las canchas más de dos meses, en los que perdió el primer puesto del ranking antes de regresar en el torneo de Montreal, donde cayó en cuartos de final ante el argentino Juan Martín del Potro.
En Cincinnati, una semana después, alcanzó las semifinales, donde perdió ante el serbio Novak Djokovic. Lo mismo hizo en el US Open, el único Grand Slam que falta en su palmarés, en el que fue derrotado por el a la postre campeón, Del Potro. Tras Nueva York, nuevos dolores en los abdominales le obligaron otra vez a parar todo el mes de septiembre. Su segundo regreso se produjo en Pekín con otras semifinales.
Nadal jugó hoy su octava final de 2009, de las que por ahora ganó cinco, todas ellas entre febrero y mayo: en Roma, Barcelona, Montecarlo, Indian Wells y el Abierto de Australia. La evolución de Davydenko durante el año fue precisamente al contrario. El ruso logró en Shanghai su cuarto título de la temporada, después de Kuala Lumpur, Umag y Hamburgo, pero todos ellos llegaron a partir de julio.
El ex número tres del mundo es uno de los grandes candidatos para quedarse con uno de los tres últimos puestos que dan acceso al Masters de Londres, torneo que reúne a los ocho mejores del año y pone fin a la temporada.
