La estadounidense Samantha Geimer, de 46 años en la actualidad y residente en Hawai, quien fuera la víctima, en el sonado caso del director Roman Polaski, sostuvo que en las últimas semanas recibió casi 500 llamados de periodistas de todo el mundo, señaló su abogado Lawrence Silver en la petición judicial, es por esto que ha afirmado que la interminable difusión del caso desde el arresto del cineasta en Suiza afecta su vida familiar, su trabajo y su salud.
«Por favor déjenla en paz», pidió Silver, ya que hay fotógrafos afuera de su casa, que además acosan a sus hijos. Todo esto por los desafortunados hechos que ya todos conocemos: en 1977, Polanski emborrachó y violó en la casa de su amigo Jack Nocholson a Geimer, de entonces 13 años.
Y en estos últimos tiempos, el ganador del Oscar fue arrestado recientemente en Suiza por petición de la justicia estadounidense y Washington ya pidió su extradición. Ya que Polanski confesó la violación de la niña en un juicio en California en 1978. En 1993, Polanski se manifestó dispuesto a indemnizar a su víctima con 500.000 dólares, según antecedentes judiciales.
Pero se desconoce si cumplió la oferta. En 1996, Geimer intentó obtener el dinero. Un año después retiró la demanda y pidió por escrito al juez permitir a Polanski ingresar en Estados Unidos y suspender el juicio en su contra. A cambio sus abogados negociaron una pena menor. Cuando hubo indicios de que el juez no respetaría el acuerdo, Polanski huyó de Estados Unidos y nunca más volvió.
Aeronoticias considera que si bien Roman Polanski es una de las personalidades mas destacadas del cine mundial, hechos como este, -en el que esta involucrada una violación y el consumo de alcohol- es un ejemplo absolutamente deplorable para la sociedad mundial, por lo que merece toda la atención y el castigo de las autoridades.
