El derrocado mandatario hondureño Manuel Zelaya declaró hoy terminado el diálogo con Roberto Micheletti, luego de que el gobernante de facto anunciara que encabezará el futuro Gobierno de Unidad Nacional que deberá convocar a elecciones.
«De aquí en adelante, hemos declarado que no se puede dialogar con un gobierno golpista. Está evidentemente señalado que no son honestas las pláticas, no se sostiene ni el honor de la palabra», dijo Zelaya a Radio Cooperativa de Chile vía telefónica.
«La salida, si existiera, estamos elevándola a la Organización de Estados Americanos (OEA). Ya no a buscar un arreglo interno. Ha quedado totalmente agotado y ya no tiene ningún sentido continuarlo», añadió Zelaya desde Tegucigalpa, capital hondureña.
El denominado acuerdo de Tegucigalpa-San José, que preveía un pronunciamiento del Congreso hondureño sobre la restitución en su cargo de Zelaya quedó en punto muerto tras la decisión de Micheletti de continuar en el gobierno.
