El presidente de México, Felipe Calderón, compartió hoy la cifra que dio a conocer el Fondo Monetario Internacional de un crecimiento de la economía mexicana de 3 por ciento en 2010 y el pronóstico de cerrar los dos últimos años de su administración a tasas del 5 por ciento de incremento. En su mensaje a los asistentes a la Cumbre de Negocios Monterrey 2009, en el municipio de San Pedro Garza García, vecino con la ciudad de Monterrey, capital del estado de Nuevo León, el jefe del Ejecutivo dijo que es el objetivo que se fijó como mandatario.
Por la mañana, el director de The Western Department, del FMI, Nicolás Eyzaguirre, dijo que México crecería 3 por ciento en el 2010 y enumeró las causas de su dicho. El presdente Calderón ante economistas, investigadores, líderes políticos y el presidente de Costa Rica, Oscar Arias, subrayó: «Refrendo mi objetivo de que es posible alcanzar la cifra del 5 por ciento».
«Sólo necesitanos redoblar esfuerzos para que esta tendencia continúe en el trimestre y se refleje en la calidad de vida de los mexicanos». Dijo que la crisis encierra oportunidades y en el reacomodo la economía mexicana puede salir ganadora. Y agregó que si por el tipo de cambio, o el incremento en el transporte o los ajustes, en los últimos seis meses «ganamos el 1 por ciento del total del mercado americano de importaciones en demérito de economías que nos compiten».
Antes se refirió a que la economía nacional creció 2,7 por ciento en el cuarto trimestre, «y si esta cifra fuera analizada como lo hacen en Estados Unidos que el trimestre lo hacen de manera exponencial, sería una tasa anual de más de 10 por ciento». El presidente apuntó que en octubre de 2009, según datos del Instituto Mexicano del Seguro Social, se crearon 80 mil nuevos empleos y que de junio a octubre fueron 200 mil, es decir, cinco meses seguidos generando empleos, y ya descontando las bajas y renuncias de la extinta Luz y Fuerza.
Y en este sentido dijo que en contraste, en Estados Unidos se vienen perdiendo 200 mil empleos cada mes. Calderón señaló que en la crisis de 1995, que la comunidad internacional bautizó como «crisis del Tequila», hubo una pérdida de empleos del orden del 11 por ciento, es decir de 1 por cada 10 y la economía cayó a una tasa cercana de 6 por ciento del PIB.
En 2009, a pesar de que la crisis fue muy profunda la variación en desempleo fue de 1,6 por ciento. Reiteró que la economía mexicana debe crecer, aunque admitió que la recaudación tributaria en el país es inferior a la que recaudan naciones como Costa Rica y Brasil.
