Según el ministro de Minas y Energía de Brasil, Edison Lobao, el problema se debió a un desperfecto en la central hidroeléctrica paraguayo-brasileña de Itaipú, y fue causado «probablemente» por factores climáticos, lo que causó que un gigantesco apagón dejó a oscuras anoche a alrededor de 800 ciudades de nueve estados brasileños, entre ellos las metrópolis de San Pablo, Río de Janeiro y Belo Horizonte. El problema se debió a un desperfecto en la central hidroeléctrica de Itaipú.
«Nos imaginamos que una tempestad de gran intensidad pueda haber contribuido a desconectar las líneas (de transmisión) de Itaipú y, en consecuencia, otras líneas dejaron de funcionar», expresó el ministro, en una entrevista concedida en Brasilia.
El problema, que todavía no fue identificado, afectó el suministro de electricidad en la industrializada región sureste y en parte de las regiones noreste y centro-oeste, donde se ubica Brasilia. Según las agencias locales, el problema también causó un apagón en Paraguay, aunque en el país vecino el problema se solucionó rápidamente.
El apagón se produjo poco después de las 22 (las 21 en la Argentina) y el problema no había sido solucionado hasta el inicio de la madrugada del miércoles.
Según el presidente de Itaipú Binacional, Jorge Salek, todavía no hay previsión sobre cuándo se logrará restablecer el suministro de electricidad, porque el apagón dificulta el contacto con los técnicos que pueden solucionar el problema, ya que afecta también las comunicaciones, especialmente las de la telefonía móvil.
Salek afirmó que el problema no ocurrió en la generación de energía, sino en la transmisión de la electricidad, y sostuvo que hay «99 por ciento de posibilidades» de que haya sido causado por los fuertes vientos que azotaron la región vecina a la ciudad de Foz do Iguazú, donde está ubicada Itaipú.
Aeronoticias considera que es necesario un plan de contingencia en casos como este debido a que como es usual –y extraño a la vez- las ciudades más grandes y avanzadas del mundo siempre son las más vulnerables cuando sucede un fenómeno como este, recordemos el ultimo apagón general en Nueva York –una de las ciudades más grandes del mundo- donde una situación tan simple como esa cobró víctimas mortales, afortunadamente el apagón en este caso solo generó caos en el tráfico de las grandes ciudades brasileñas y obligó a suspender la operación de trenes urbanos y del subterráneo en Río de Janeiro y San Pablo, además de afectar al aeropuerto internacional de Río de Janeiro, pero sin víctimas mortales.
