El presidente de México, Felipe Calderón, afirmó hoy que «2010 será el año de la recuperación económica, porque esta fue una crisis que vino del extranjero y hoy en todo el mundo hay ya señales de mejoría». «Nuestra economía está lista para retomar el crecimiento; de hecho, hemos empezado a crecer desde la última parte del año pasado y esto se ha reflejado en la creación de miles de empleos en los últimos meses», aseguró Calderón en un mensaje dirigido a la nación.
El mandatario admitió que, a pesar de la fuerte caída en los ingresos del petróleo, las finanzas públicas están en orden, y a diferencia de lo que pasa en muchas naciones, en México, «ni enfrentamos una crisis bancaria, ni arrastramos problemas de deuda externa». «Hoy las expectativas de los inversionistas sobre México están mejorando y eso abre nuevas posibilidades de inversión en proyectos productivos que generen los empleos que tanto necesita el país», destacó.
El presidente mexicano comentó que su gobierno ya se encuentra trabajando en generar mejores condiciones a fin de que más empresas nacionales y del mundo inviertan en territorio mexicano. «Los países a los que vendemos nuestros productos están reactivando poco a poco su crecimiento y esto se refleja en un aumento de nuestras exportaciones a esos países», refirió.
Asimismo, Calderón informó que este año el gobierno mexicano se enfocará en tres prioridades: la generación de empleos, el combate a la pobreza extrema y el fortalecimiento de la seguridad pública de la población. En lo que se refiere a la creación de empleos, el gobernante dijo que seguirá promoviendo más inversión productiva, más programas de empleo temporal, así como impulsando el apoyo al campo.
«La segunda prioridad será el combate a la pobreza extrema, para lo que se destinarán, en este año, más recursos a construir escuelas, hospitales y, sobre todo, se fortalecerán los progamas como Oportunidades, a fin de que lleguen a más mexicanos que viven en la miseria», señaló. Calderón aseguró que seguirá combatiendo a todos los grupos criminales del país, sin distingos, ya que «en muchos lugares de México los criminales siguen hostigando, amenzando y extorsionando a muchas familias que necesitan el apoyo decidido de los tres órdenes de gobierno».