La elaboración del pisco peruano es “más artesanal” y se utiliza para su destilación alambiques de cobre similares a los usados para hacer coñac, además, el gobierno dio normas estrictas que garantizan que no utilizan aditivos para modificar sus propiedades físicas.

Elizabeth da Trindade-Asher, de Macchu Pisco, expresó que el licor de bandera aspira a ser un producto fino y totalmente natural, sin recurrir al roble de envejecimiento.
Por otra parte, el enólogo Edwin Landeo del Pino dijo que ahora los viñedos del sur del país están haciendo buenos piscos, situación que no ocurría hace cinco o seis años atrás.
«Los Angeles Times» también indica que, en los mejores bares y restaurantes de Lima se puede encontrar “piscos premium” y en diferentes presentaciones para las que se utilizan frutas peruanas como el camu-camu.
Por tanto, en Estados Unidos solo se venden pocas marcas como Macchu Pisco, BarSol y Montesierpe de Perú; y Capel y Alto del Carmen, de Chile.
Según la Comisión Nacional del Pisco, en el año 2008 las ventas de pisco peruano aumentaron en un 48% en el mercado norteamericano y, en paralelo, su producción se triplicó.