(Aeronoticias) Cultivar frutas y verduras requiere algunos pasos básicos. Aquí tienes una guía general para empezar:
- Elige un lugar adecuado: Busca un área con buena exposición al sol y un suelo bien drenado.
- Prepara el suelo: Remueve las malas hierbas y mejora el suelo con compost orgánico para proporcionar nutrientes y mejorar la retención de agua.
- Siembra o planta adecuadamente: Sigue las instrucciones específicas para cada planta, ya sea sembrando semillas o plantando plántulas. Asegúrate de darles suficiente espacio para crecer y desarrollarse.
- Riega correctamente: Las plantas necesitan agua adecuada para crecer, pero evita el exceso de riego. Riega regularmente y profundamente, evitando que el suelo se seque completamente.
- Controla las plagas y enfermedades: Inspecciona tus plantas regularmente en busca de signos de plagas o enfermedades. Si las encuentras, utiliza métodos orgánicos de control de plagas, como el uso de insecticidas naturales o trampas.
En cuanto a los abonos, puedes utilizar varias opciones orgánicas, como:
- Compost: El compostaje casero es una excelente manera de reciclar materia orgánica y enriquecer el suelo.
- Estiércol: El estiércol de animales, como el de vaca o caballo, puede ser utilizado como abono, pero debe estar bien compostado para evitar el riesgo de enfermedades.
- Abonos verdes: Estas son plantas que se cultivan específicamente para ser incorporadas al suelo, como la alfalfa o el trébol. Ayudan a mejorar la estructura del suelo y aportan nutrientes.
Recuerda investigar las necesidades específicas de cada fruta o verdura que deseas cultivar, ya que cada una puede tener requisitos de riego, luz solar y abono ligeramente diferentes.
Fuente: Gardentech
Por: Sebastián Palacin