«El mejor sitio para una siesta después de almorzar es el sillón más que la cama»

Si estás buscando la mejor manera de recargar energías después del almuerzo, considera hacerlo en un sillón cómodo.

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(Aeronoticias): Un estudio reciente desafía la noción tradicional de que la cama es el lugar ideal para tomar una siesta después del almuerzo, y en su lugar, sugiere que el sillón puede ser la opción más beneficiosa. Investigadores en el campo del sueño y la salud han encontrado que tomar una siesta en un sillón podría ofrecer una serie de ventajas para la salud y el bienestar.

El estudio, realizado por un equipo de expertos en sueño de renombre, examinó la calidad y los beneficios de las siestas en diferentes entornos, incluyendo la cama y el sillón. Los hallazgos revelaron que descansar en un sillón después del almuerzo podría tener beneficios notables:

1. Mejora de la digestión: Los participantes del estudio que tomaron siestas en sillones reportaron una digestión más eficiente, posiblemente debido a la posición ligeramente inclinada que facilita el proceso de digestión en comparación con estar completamente acostado en la cama.

2. Mayor productividad: Aquellos que se tomaron un breve descanso en el sillón después de la comida informaron sentirse más alerta y enfocados al regresar a sus tareas, lo que podría mejorar la productividad en el trabajo.

3. Reducción del estrés: El ambiente relajante y cómodo del sillón contribuyó a una disminución significativa en los niveles de estrés durante la siesta, en comparación con la cama, lo que podría tener beneficios a largo plazo en la salud mental.

4. Facilitación del sueño nocturno: Contrariamente a la creencia popular de que las siestas en la cama pueden dificultar el sueño nocturno, las siestas en el sillón no parecieron afectar negativamente la calidad del sueño durante la noche, según los resultados del estudio.

Estos hallazgos sugieren que el sillón puede ser un lugar óptimo para tomar una siesta rápida después del almuerzo, ya que puede ofrecer beneficios notables para la salud y el bienestar. Sin embargo, es importante recordar que la duración y el momento de la siesta también desempeñan un papel crucial en sus efectos. Si planeas incorporar siestas en tu rutina diaria, asegúrate de que no sean demasiado largas ni demasiado tarde en el día para evitar interferir con tu sueño nocturno.

Si estás buscando la mejor manera de recargar energías después del almuerzo, considera hacerlo en un sillón cómodo. Esta práctica puede no solo ofrecer beneficios físicos y mentales, sino también mejorar tu bienestar general.

Fuente: 20minutos.es

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