(Aeronoticias): Un reciente hallazgo en el campo de la salud pública y la entomología ha arrojado luz sobre la transmisión de un parásito tropical que puede causar infecciones graves de la piel. Se ha descubierto que un insecto específico está desempeñando un papel clave en la propagación de esta enfermedad, lo que podría tener importantes implicaciones para la prevención y el control de la misma.
El insecto en cuestión es conocido como el «mosquito negro» o «simulium», que es un vector de un parásito llamado Onchocerca volvulus. Este parásito es responsable de la oncocercosis, una enfermedad tropical desatendida que afecta a millones de personas en regiones de África, América Latina y el Medio Oriente.
El parásito Onchocerca volvulus causa lesiones graves en la piel, incluyendo nódulos subcutáneos y picazón intensa. En casos graves, puede provocar ceguera debido a la inflamación ocular.
El estudio revela que el mosquito negro, que se encuentra en áreas donde la oncocercosis es endémica, es el principal transmisor del parásito. Comprender la ecología y el comportamiento de este insecto es esencial para desarrollar estrategias efectivas de control y prevención de la enfermedad.
Los expertos en salud están trabajando en colaboración con organizaciones internacionales para abordar la propagación de la oncocercosis, que sigue siendo un desafío de salud importante en muchas regiones del mundo. La identificación de los insectos responsables de la transmisión permitirá dirigir los esfuerzos hacia la eliminación de esta enfermedad tropical y la mejora de la calidad de vida de las comunidades afectadas.
Fuente: CNN.