(Aeronoticias): Los padres a menudo se preocupan cuando sienten que las manos y los pies de sus bebés están fríos al tacto, incluso cuando la temperatura ambiente es cálida. Sin embargo, este fenómeno es común en los bebés y generalmente no es motivo de alarma. Aquí te explicamos por qué los bebés tienen frías las extremidades y cómo puedes ayudarlos a mantenerse cómodos.
1. Sistema de regulación de la temperatura: Los bebés, especialmente los recién nacidos, tienen un sistema de regulación de la temperatura inmaduro. Su cuerpo no puede conservar el calor de la misma manera que el de un adulto. La piel de las manos y los pies de los bebés es delgada y contiene una gran cantidad de vasos sanguíneos cerca de la superficie, lo que hace que estas extremidades se enfríen más rápidamente.
2. Distribución de sangre: Cuando los bebés sienten frío, su cuerpo prioriza mantener la temperatura de los órganos vitales, como el corazón y el cerebro. Para hacerlo, reduce el flujo de sangre hacia las extremidades, lo que puede hacer que las manos y los pies se sientan fríos al tacto.
3. Respuesta al ambiente: Los bebés también reaccionan al ambiente circundante. Si están expuestos al frío, su cuerpo redirigirá el flujo sanguíneo hacia sus órganos internos para mantener su temperatura central, lo que nuevamente puede llevar a extremidades frías.
Consejos para mantener a los bebés cómodos:
- Vestimenta adecuada: Viste a tu bebé con ropa adecuada para la temperatura ambiente. En climas fríos, asegúrate de que estén abrigados, y en climas cálidos, viste a tu bebé con ropa ligera.
- Mantas y gorros: Utiliza mantas ligeras y gorros para mantener la cabeza de tu bebé caliente, ya que gran parte del calor corporal se puede perder a través de la cabeza.
- Control de la temperatura ambiente: Asegúrate de que la habitación en la que se encuentra tu bebé no esté demasiado fría ni demasiado caliente. La temperatura ideal para el cuarto del bebé es generalmente entre 20-22°C.
- Comprobación del bienestar: Observa el bienestar general de tu bebé, como su color y energía. Siempre es importante estar atento a los signos de incomodidad o frío excesivo.
En resumen, los bebés tienen manos y pies fríos debido a la inmadurez de su sistema de regulación de la temperatura y la distribución de sangre. Es normal que sus extremidades estén más frías al tacto que el resto de su cuerpo. Sin embargo, es esencial seguir los consejos mencionados para garantizar que tu bebé se sienta cómodo y seguro en cualquier clima.
Fuente: El Comercio.