(Aeronoticias): La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (NTSB) señaló una falla en las hélices como la causa del accidente de un avión eléctrico Joby Aviation pilotado a distancia en 2022.
Según el informe del organismo, después de alcanzar una velocidad máxima de inmersión de 181 nudos, velocidad indicada (kias) a una altitud de aproximadamente 8,900 pies, una pala de hélice en la estación de propulsión 3 experimentó una falla por flexión cerca de la raíz de la pala que culminó con la liberación de la pala de la hélice.
La pala liberada impactó la hélice en la estación de propulsión 4, ubicada en el exterior del ala derecha, lo que posteriormente provocó la liberación de la pala impactada.
El resultado fue un efecto en cascada, con fallas en las otras palas de la hélice y separaciones de los motores de propulsión, lo que resultó en la pérdida de control de la aeronave. El avión giró hacia la izquierda, luego entró en picada invertida y se estrelló en un área deshabitada cerca de Jolon, California. No hubo heridos y el avión quedó destruido.
“Los programas de pruebas de vuelo experimentales están diseñados intencionalmente para determinar los límites del rendimiento de las aeronaves y, al hacerlo, proporcionar conocimientos y aprendizajes críticos que respalden la operación segura de las aeronaves, así como informar los elementos de diseño final”, informó Joby en una declaración a Flying.
La compañía añadió que seguirá trabajando con la FAA para resolver cualquier problema de seguridad antes de la certificación del vehículo. Añadió que compartirá cualquier hallazgo relevante con otros fabricantes de aviones eléctricos de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL).
El accidente tuvo lugar el 16 de febrero de 2022, ocurrió durante el segundo vuelo de prueba de el día del JAS4-2, el primero de dos prototipos de preproducción de segunda generación.
Dado que el JAS4-2, un avión experimental no tripulado denominado N542AJ, participó en las pruebas de vuelo, fue observado desde un avión de persecución tripulado.
El vuelo comenzó alrededor de las 09:42 PST con un despegue vertical normal, transición a vuelo con alas y ascenso hasta 11,000 pies msnm. El piloto remoto al mando (PIC) puso la aeronave en descenso, alcanzando la unidad una velocidad máxima de inmersión de 181 nudos.
Al pasar la aeronave a 8,900 pies, la hélice de la estación de propulsión 3 ubicada en el ala interior derecha experimentó oscilaciones en las revoluciones y vibraciones del motor.
“Desde el accidente, hemos incorporado una serie de mejoras a nuestras metodologías de diseño y prueba, muchas de las cuales ya estaban planificadas, y nuestro segundo prototipo de avión de preproducción ha volado casi 25,000 millas, incluidos más de 100 vuelos realizados por un piloto a bordo, así como vuelos de exhibición en la ciudad de Nueva York”, informó la compañía.
Fuente: A21.com.mx