(Aeronoticias): El nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez se encuentra en la etapa final de pruebas de sus sistemas y equipos, preparándose para su apertura en los próximos meses. Con un avance superior al 85%, el proyecto promete ofrecer una experiencia de viaje segura, ágil y eficiente a sus 30 millones de pasajeros anuales.
“Hoy, nos encontramos en la recta final para entregarle al Perú un nuevo aeropuerto, un hito importante no solo para LAP, sino para toda nuestra comunidad aeroportuaria y para el país. Estamos en la fase de pruebas de funcionamiento de los equipos, sistemas y procesos, para la puesta en marcha y operación del nuevo terminal. Esta etapa es muy compleja, por ello, participan cientos de técnicos y profesionales expertos de LAP y el sector aeronáutico”, señaló Bill Fullerton, director del Proyecto de Ampliación en Lima Airport Partners.
En estos momentos, se están realizando “pruebas exhaustivas” de los principales sistemas y equipos del nuevo terminal, incluyendo el manejo de equipaje, mangas de abordaje, ascensores, escaleras mecánicas, rampas y pasarelas mecánicas. Estas pruebas son cruciales para garantizar la seguridad y eficiencia de las operaciones desde el primer día de funcionamiento del aeropuerto.
LAP tiene previsto inaugurar el moderno terminal el 18 de diciembre de 2024. La superficie del nuevo terminal se triplicará, pasando de 90,000 metros cuadrados a 270,000 m2, lo que permitirá atender a 30 millones de pasajeros al año. En el 2025, la capacidad se ampliará aún más para alcanzar a 40 millones de pasajeros.
Así avanza el desarrollo del nuevo Jorge Chávez
El nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez estará equipado con tecnología de última generación, lo que permitirá ofrecer una experiencia de viaje más moderna y confortable a los pasajeros. Entre las novedades tecnológicas se encuentran el sistema de manejo de equipaje de bodega (BHS), que permitirá operar 2,400 maletas por hora en una fase inicial, y las 8 pasarelas mecánicas que conectarán los diferentes pisos del terminal.
Lo anterior será distribuido entre los 5 niveles que tendrá el nuevo terminal. Además, la infraestructura contará con flujos diferenciados para salidas y llegadas, lo que permitirá una mejor organización y fluidez en el tránsito de pasajeros. Asimismo, el diseño moderno del terminal, con amplios espacios y abundante luz natural, contribuirá a crear una experiencia de viaje más agradable.
Uno de los aspectos más resaltantes que el nuevo terminal contará con 1.100 aisladores sísmicos que le permitirán seguir funcionando incluso tras un sismo grande. Esta característica es de gran importancia para garantizar la seguridad de los pasajeros y del personal del aeropuerto en caso de un evento sísmico.
La apertura del nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez será un hito importante para el Perú, ya que representará un salto cualitativo en la infraestructura aeroportuaria del país. El nuevo terminal contribuirá a mejorar la conectividad del Perú con el mundo y a impulsar el desarrollo económico y turístico del país.
Discrepancias con la inauguración
Pese a los esfuerzos de los involucrados para la puesta en marcha del nuevo aeropuerto; gremios, entidades y perfiles del sector aeronáutico han mostrado su preocupación por la fecha de inauguración. Desde la Asociación de Empresas de Transporte Aéreo Internacional (AETAI) y la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), han solicitado que la apertura del nuevo terminal se posponga hasta enero de 2025.
Aplazar su apertura responde al contexto en que se prevé iniciar las operaciones, dado que es la semana previa a la Navidad y se generaría un estrés aéreo tanto para las aerolíneas como para los pasajeros. Eso, sin contar con el posible caos que se genere en un aeropuerto recién inaugurado. Aunado a lo anterior, los diversos percances y fallos en el actual terminal, como el reciente apagón de la pista de aterrizaje, añaden mayor incertidumbre a la ecuación.
Según explicó Diego Cuesta, ORAT Project Manager de LAP, la apertura del nuevo Jorge Chávez está cuidadosamente planificada. Los últimos vuelos llegarán a la terminal actual a las 00:45 horas del 18 de diciembre, y el nuevo terminal comenzará a operar pocas horas después. De hecho, se estima que alrededor de la 2:30 horas, el terminal deberá haber sido evacuado en su totalidad para cerrar las operaciones de manera definitiva.
Esto se traduce en un nulo tiempo de adaptación del personal en el nuevo ambiente. Sumado a los factores antes descritos, como la alta demanda de viajes por fiestas de fin de año, podría implicar un desorden y posibles accidentes en el que promete ser el hub aeroportuario de Sudamérica.
Fuente: peru-retail.com