(Aeronoticias).- Un pasajero de la compañía Delta Air Lines montó sin querer un alboroto tras abandonar su equipaje en el aeropuerto de Seattle, originando la sospecha de tener algún tipo de explosivo al interior de la maleta.
Según declaró ante las fuerzas del orden tras haber llegado al aeropuerto JFK, el pasajero se negó a pagar mil 400 dólares que la aerolínea quiso cobrarle por las maletas que transportaba. Dejó el equipaje en el aeropuerto Sea-Tac y tomó su vuelo.
Tras dicha acción, las autoridades cerraron el pasillo de embarque de Delta por más de dos horas. Inspeccionaron con rayos X la maleta y convocaron a especialistas en explosivos para dirimir si había algún tipo de bomba alojada dentro. «Determinaron que no había contenido sospechoso», señaló la portavoz del aeropuerto Sea-Tac, Christina Faine.
Con información de NBC y la fotografía de Christina M.
