(Aeronoticias).- Luego de la muerte de un ejecutivo de Microsoft, su hija adolescente y dos niñas en el accidente de avioneta cercana al aeropuerto de Tweed New Haven tras estrellarse en un vecindario de Connecticut, las autoridades aeroportuarias de la zona decidieron comprar los terrenos aledaños por medidas de seguridad.
Anteriormente, las autoridades del aeropuerto gastaron más de un millón de dólares, como parte del Plan Maestro para incrementar la longitud de la pista de aterrizaje o incrementar la zona de «colchón» por si una aeronave tiene que abortar un vuelo, explicó Tim Larson, director ejecutivo del aeropuerto.
«Fue prudente para el aeropuerto comprarlas», expresó Larson.
Con información de Wall Street Journal.