(Aeronoticias): En el corazón de los Alpes suizos, a orillas del lago St. Moritz y rodeado por montañas nevadas, se alza el Badrutt’s Palace Hotel, una de las joyas más emblemáticas de la hotelería mundial. Inaugurado en 1896 por Johannes Badrutt, pionero del turismo de invierno en Suiza, este palacio no solo introdujo el concepto de vacaciones alpinas de lujo, sino que se convirtió en sinónimo de glamour, exclusividad y hospitalidad impecable.
El hotel cuenta con 157 habitaciones y suites, cada una decorada con un estilo que combina elegancia clásica y comodidades contemporáneas. Entre sus espacios más exclusivos destaca la Suite Helen Badrutt, con vistas panorámicas al lago y un diseño que mezcla tradición alpina con lujo moderno. El Wellness & Spa Palace ofrece más de 2,800 m² dedicados a la relajación, con piscina cubierta y al aire libre, baños de vapor, saunas y tratamientos con productos de alta gama.
En materia gastronómica, el Badrutt’s Palace alberga siete restaurantes y bares que abarcan desde alta cocina internacional hasta especialidades locales. Entre ellos sobresale el IGNIV by Andreas Caminada, galardonado con estrella Michelin, y el histórico Chesa Veglia, una casa rústica del siglo XVII convertida en complejo gastronómico con trattoria, pizzería y grill de lujo.
Su slogan es: “Where My Heart Belongs” (“Donde pertenece mi corazón”). La visión del Badrutt’s Palace es consolidarse como el máximo referente del lujo alpino en el mundo, mientras que su misión es ofrecer a cada huésped una experiencia inolvidable que combine naturaleza, bienestar y tradición.
Los precios reflejan la exclusividad: hospedarse aquí puede costar entre 1,400 y 15,000 euros por noche, dependiendo de la temporada y la suite elegida. El código de vestimenta se inclina hacia la elegancia alpina, con trajes formales en cenas y un estilo deportivo refinado en actividades al aire libre.
Entre los premios destacan su presencia en la lista de Forbes Travel Guide Five-Star Hotels y en el Condé Nast Traveler Gold List. Además, ha sido escenario de películas, eventos sociales de la alta sociedad y destino recurrente de personalidades como Audrey Hepburn, Alfred Hitchcock y miembros de casas reales europeas.
Los comentarios de usuarios resaltan la atención al detalle, el servicio cercano pero impecable, y la atmósfera mágica que convierte cada estancia en un recuerdo único. Críticos coinciden en que pocas experiencias igualan la sensación de disfrutar un cóctel en el Renaissance Bar mientras cae la nieve sobre el lago.
La filosofía del Badrutt’s Palace es clara: fusionar hospitalidad suiza con lujo atemporal, creando un refugio donde tradición y modernidad se encuentran en un entorno natural incomparable.
Así, el Badrutt’s Palace no es solo un hotel, sino una institución que desde hace más de un siglo da forma al turismo de lujo en los Alpes, manteniéndose como el epicentro de la sofisticación y la elegancia en St. Moritz.
Fuente: Sebastián Palacín