(Aeronoticias).- La cifra de fallecidos por los terremotos de 6.4 y 6.3 grados en la escala de Richter, que el último sábado remecieron la parte noroccidental de Irán, se elevó a 300, y los heridos aumentaron a 2,600, según el gobernador de la provincia de Ahar, Reza Sadighi.
Unos cuatro pueblos han quedado totalmente destruidos en la región de Ahar, y en otros 60 el sismo afectó entre el 50 y 80 por ciento de las edificaciones; mientras que en la región de Varzaqan alrededor de 12 poblados fueron devastados.
Mientras tanto, miles de iraníes pernoctan en las calles, por temor a fuertes réplicas, en improvisadas carpas o al aire libre, según reportes de fuentes locales.
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El sismo más devastador en Irán sucedió en junio de 1990, cuando un movimiento de 7.7 grados en la escala de Richter dejó 37,000 personas muertas y más de 100,000 heridas en las provincias de Gilan y Zanjan, en su territorio noroccidental, al destruir 27 pueblos y 1,870 villas.