(Aeronoticias).- Brasil vive hoy en día uno de sus mejores momentos en el sector de la aviación de negocios, siendo el país con la segunda mayor flota de jets privados, detrás sólo de los Estados Unidos.
Brasil es además el tercer mayor fabricante de aviones de este tipo con la constructora Embraer, apenas superada por la canadiense Bombardier y el estadounidense Cessna.
El buen desempeño se debe en gran parte a la crisis internacional iniciada en 2008, que creó un ambiente favorable para la compra de estos aviones en otros países, además del crecimiento de las economías emergentes.
Factores como un real sobrevalorado, el mercado extranjero en depresión, la aparición de mejores tasas de interés e incluso descuentos, que acaban reduciendo el precio, y el buen desempeño de la economía nacional, hacen que sea más fácil para los brasileños comprar estos aviones en el extranjero.
Aunque tradicionalmente había más aviones de negocios en los Estados Unidos y Europa, con la actual crisis en estos mercados y el avance de las economías en desarrollo, se han convertido en centros de otros grandes motores de esta industria – y la tendencia se está expandiendo.
Según el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), Brasil tiene 5.565 municipios, pero de éstos, de acuerdo con el analista de la BBC en Brasil, sólo 130 tienen aeropuertos utilizados por compañías aéreas.
Por otra parte, hay 4.105 pistas de aterrizaje para aviones pequeños, 713 de ellas están pavimentadas y 3.392 son de tierra. En comparación, los Estados Unidos tienen 500 aeropuertos utilizados por líneas comerciales y 18.000 para jets corporativos.
Las pistas de tierra pueden usarse sólo para aviones de turbohélice y generalmente se encuentran en regiones del interior del país, así como granjas. El dato muestra el potencial del crecimiento del mercado de jets en el país y la demanda acumulada de más aeropuertos regionales.
Con el objetivo de obtener una mayor participación de este segmento, Embraer, que desde 1969 se ha convertido en el tercer mayor fabricante de aviones comerciales y de defensa en el mundo, detrás de Boeing y Airbus, planea incrementar sus inversiones en el mercado.
Aunque el primer avión se entregó en 2002, la empresa sólo montó una línea completa de jets hace cinco años, con modelos que cuestan desde US$4,1 millones hasta 55 millones.
En este corto tiempo la Embraer tiene ya una posición de liderazgo mundial, habiendo sido responsable de 15 de estas entregas de aviones del mundo -en 2012- y la intención es elevar ese número, entre el público australiano.
«El Brasil va bastante bien, el mercado es comprador y esperamos entregar una cantidad importante de aviones en el país este año», dice Marcus Tullius Pellegrini, vicepresidente de Embraer Aviación Ejecutiva.
Los jets representan el 21% de las ventas de Embraer, y la intención, dice Pellegrini, es que la cifra se eleve al 25% a finales de 2013. Él explica que incluso en los países en crisis todavía hay mercado, y que los Estados Unidos, por ejemplo, a pesar de no registrar un aumento en las ventas, continúan siento el número uno en compras mundiales.
«El número de millonarios en Brasil y en el mundo continúa, el negocio está floreciendo. Existe una incerteza en cuanto a la economía mundial, pero es una incerteza. Las personas que lideran el mundo de los negocios aceptan tomar riesgos en tiempos de incertidumbre», comenta.
Los Estados Unidos están en la parte superior de la lista de compradores de Embraer, con 40% de los 630 jets de negocios brasileño que operan en todo el mundo. Brasil está en el segundo lugar, con 20%, seguido por Gran Bretaña, Alemania y los Emiratos Árabes Unidos.
El analista Francisco Lyra dice que hay un estereotipo entre el público, de que los jets están relacionados con el mercado de lujo, cuando en realidad, a pesar de la sofisticación, se dirigen principalmente al mundo de los negocios para optimizar el tiempo y los recursos de las grandes empresas.
Xinhua.
