(Aeronoticias) Como afirmáramos el 31 de diciembre del 2015, Gemalto-Imprimerie Nationale (los mismos de Migraciones), se hicieron, por exoneración, de los pasaportes electrónicos en Cancillería. Fue consignado el dato en la página de SEACE, ese mismo jueves 31-12-2015, y dimos cuenta, consignando los documentos, tal como hacemos hoy, como adjuntos, sucintamente en: ¡Exoneración obsequia a Gemalto e-pasaportes de Cancillería! www.voltairenet.org/article189786.html?var_mode=recalcul
Nótese un dato que haría las delicias de cualquier proveedor: en agosto el requerimiento en Torre Tagle era por la suma de US$ 12 millones de dólares. En diciembre subió, como la espuma, como fin de fiesta y graduación promocional a US$ 26 millones. ¡Provecho!
¿Hay que preguntarse cómo sí puede Cancillería motorizar un proyecto para pasaportes electrónicos en menos de 7 días hábiles, en horas inapropiadas, con plazos anti-técnicos, haciendo tabla rasa de lógica y decencia, colocando cortapisas y pavimentando el camino a Gemalto-Imprimerie (como en Migraciones) y que oficializará su caballazo el próximo martes 5 con la dación de la buena pro.
Nunca será suficiente recordar que el proceso que tumbaron (y así lo anticipamos), para pasaportes electrónicos diplomáticos y especiales que era por 200 mil unidades en Cancillería, en agosto, fue torpedeado hasta su hundimiento por manos negras vinculadas al montesinismo, en especial la firma Segres Systec S.A., cuyo dueño, Nicolás Kecskemethy incurrió en negocios millonarios de armamentos con Vladimiro Montesinos, tal como fue publicado en La República a partir del 2001.
¡En menos de 120 días!, diciembre 2015, apareció el requerimiento al doble del volumen: ¡400 mil ejemplares! ¿Creció el mercado de diplomáticos y de solicitantes de pasaportes especiales en esos rangos tan espectaculares para justificar esa demanda? Me temo que la respuesta es rotunda: NO.
El jueves 31, también, se informó en Andina que las gracias habían sido dadas al ex viceministro de Relaciones Exteriores, Julio Martinetti Macedo y se le apartaba de sus labores institucionales. Habría sido una de las voces discordantes respecto a cómo se llevaba el adefesio que ha concluido, vía exoneración, con el obsequio de Cancillería a Gemalto-Imprimerie Nationale de los e-pasaportes.
El fin del 2015 trajo muchas sorpresas. Entre otras y que dan mucho que pensar e impulsan la imaginación, el portazo que el presidente Ollanta Humala dio al gobierno francés al observar un tratado cuya aprobación había sido otorgada meses antes por el Congreso. ¿Fue casualidad o se adentra, militarmente hablando, por los pantanosos terrenos de una “negociación” el jefe de Estado?
En Perú llueve para arriba. Hasta hoy no hay quien desmienta este apotegma de nuestra historia.
Y si en Colombia sólo hubo un Gabriel García Márquez, en Perú hay muchos Macondos que aguardan a un escritor, en el ámbito del realismo mágico, para aterrizar tales fantasías. Sabido es que en nuestra Patria la realidad y lo increíble distan apenas micras de milímetro.
Adentrémonos en lo que un narrador hábil, podría pergeñar. La observación del tratado diplomático con Francia, procuraría plazos más perentorios para que dos empresas, Gemalto-Imprimerie, violando el contrato de buena pro, aún no cerrado, tal como dijo la embajadora de la Comunidad Económica Europea en Lima, Irene Horejs, haga el pasaporte electrónico en febrero o, a más tardar, en marzo, antes de las elecciones.
Con tal propósito sería espectacular que Irene Horejs, de la CEE, y Fabrice Mauriés, embajador de Francia en Perú, salgan a los medios esta primera semana de enero, a anunciar buenas noticias y en torno a la supuesta celeridad “negociada” desde los más altos planos. Lo hacen con frecuencia, ¿por qué no esta vez?
Entonces, habría e-pasaportes, entrada sin visa Schengen a Europa para los peruanos, y el ridículo de diciembre pasaría al recuerdo. Una con otra, parecen decir los estrategas militares que han olvidado un pequeño detalle: Francia es una potencia mundial y Perú un país más bien modesto de Latinoamérica. ¿O no?
Y en el medio están las negociaciones, por eso “no convenía” dar a conocer ampliamente sino entre gallos y medianoche, los documentos que por exoneración dan la buena pro a Gemalto-Imprimerie Nationale, para el pasaporte electrónico.
Cumpliendo nuestro deber periodístico y coherentes con lo que ha sido este largo capítulo del pasaporte electrónico, nos tocó la oportunidad de noticiar al país de cómo Gemalto-Imprimerie engullían la buena pro en Cancillería.
¡Los políticos en Perú piensan en pequeño y como enanos mentales y en circunstancias demasiado notorias, de otro modo el silencio habitual!
¡Ni qué decir de la prensa que mantuvo una mudez sepulcral ante las páteticas evidencias de la mediocridad del manejo de la ministro de RREE, Ana María Sánchez, el alejamiento, por discrepancias insalvables, de un viceministro, Martinetti, y el riesgo que significa colisionar por intereses discutibles con una potencia europea! La proporcionalidad, en cualquier estrategia, es imprescindible!
No hay duda posible, en Perú llueve para arriba.