(Aeronoticias).- Luego de que el agricultor Ji Zhongxing detonara una bomba casera en la puerta B del terminal 3 del aeropuerto de Pekín, las autoridades aeroportuarias han incrementado las medidas de seguridad en sus terminales aéreas.
Según informó China Daily, miembros del Equipo de Armas y Tácticas Especiales en compañía de perros policiales tratan de encontrar explosivos en alguna de las salas de los aeropuertos.
En los aeropuerto internacionales de Hongqiao y Shenzhen, los oficiales controlan los equipajes de los usuarios con el motivo de evitar el traslado de este tipo de artefactos. Para uno de los operadores aeroportuarios, el procedimiento sólo lleva unos pocos segundos.
Con información de Radio Internacional de China y la fotografía de Xiao Quan L.
