(Aeronoticias).- Airbus ha alertado de la situación de “inseguridad y alteración” que puede provocar el establecimiento de aranceles por parte de Estados Unidos a la importación de aviones y componentes aeronáuticos procedentes de la Unión Europea.
El fabricante europeo ha manifestado que “toma nota” de la decisión de la Organización Mundial del Comercio (OMC) de autorizar a EEUU para imponer los gravámenes, aunque ha recordado que “esta situación todavía se puede evitar”.
El consejero delegado de Airbus, Guillaume Faury, ha señalado que Airbus seguirá trabajando son sus socios, clientes y proveedores estadounidenses para abordar todas las posibles consecuencias de estos aranceles, que “supondrían una barrera para el libre comercio y tendrían un impacto negativo no solo para las aerolíneas estadounidenses, sino también para el empleo, los proveedores y los viajeros aéreos del país”.
Por ello, ha expresado que Airbus confía en que EEUU y la UE puedan llegar a una “solución negociada” antes de que ocasionen “graves perjuicios para la industria aeronáutica, las relaciones comerciales y la economía global”.
La OMC ha dictaminado este miércoles que EEUU podrá imponer aranceles a las importaciones de la Unión Europea por valor de 7.500 millones de dólares (6.853 millones de euros) por los subsidios ilegales recibidos por Airbus para los programas A350 XWB y A380, lo que supuso una “pérdida de ventas” para Boeing.
En los próximos meses, la OMC determinará el importe de las contramedidas arancelarias que la UE podrá imponer a los productos estadounidenses en respuesta a las ayudas públicas de Washington a Boeing.
Airbus considera que “si se llegaran a aplicar”, estos aranceles impuestos por ambas partes tendrían “un impacto muy grave” para las industrias de ambas partes que repercutirían en unos costes elevados para la adquisición de aviones nuevos por parte de las aerolíneas.
El fabricante señala en un comunicado que el 40% de sus ventas las realizan proveedores aeroespaciales de Estados Unidos y que su cadena de suministro sostiene 275.000 puestos de trabajo en 40 estados del país, con un gasto que en los últimos tres años ha alcanzado la cifra de 50.000 millones de dólares (45.690 millones de euros).
Por ello, ha reiterado que la “única forma” de evitar estos efectos negativos de los aranceles sería que ambas partes encontraran una solución a la disputa mediante un acuerdo negociado, con el ánimo de “preservar la libre competencia e igualdad de condiciones que han probado ser beneficiosos para el público y esenciales para una exitosa y próspera industria aeronáutica en todo el mundo”.
LA UE AMENAZA CON IMPONER ARANCELES
Por su parte, la UE ha amenazado a Estados Unidos con imponer aranceles a importaciones por sus subsidios a Boeing si finalmente la administración de Donald Trump opta por imponer restricciones a las exportaciones tras recibir la autorización de la OMC.
La UE ha destacado que está esperando una decisión similar de la OMC pero en este caso sobre la cifra máxima de aranceles que puede imponer a las importaciones desde Estados Unidos en respuesta a las ayudas públicas de Washington a Boeing.
De hecho, Bruselas ya presentó en abril una lista de productos a los que podría aplicar estos impuestos adicionales si al final decide hacerlo. El valor total ascendía a 20.000 millones de dólares (18.276 millones de euros) y entre los productos afectados están el kétchup, pescados congelados, frutas, videoconsolas, aviones y helicópteros.
En cualquier caso, Bruselas ha advertido de que entrar en un cruce de aranceles adicionales “infligiría daños a las empresas y ciudadanos de ambos lados del Atlántico y perjudicaría al comercio global y a la industria aeronáutica en un momento sensible”.
Fuente: Europa Press.
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