(Aeronoticias): Miguel Gutiérrez / Aviación Digital, Sp – El sector de la aviación se encuentra inmerso en un profundo proceso de descarbonización en los países occidentales. El transporte aéreo es responsable aproximadamente del 2,5% de los gases de efecto invernadero. El objetivo de la Unión Europea es llegar a las cero emisiones en 2050.
Una difícil tarea puesto que, hoy en día, no se ha desarrollado lo suficiente la tecnología verde y el precio de la transición ecológica sigue siendo altísimo. Ejemplo de ello es el precio del combustible SAF ya que es entre 3 y 5 veces más caro que el combustible estándar. Su implementación es, además, escasa. Hoy en día solo representa el 0,5% del combustible utilizado.
Beneficios y transición ecológica, ¿un binomio compatible?
Con todo esto, cabe preguntarse, ¿es posible el «desarrollo sostenible» en el sector de la aviación? David Ziegler, vicepresidente de Industria Aeroespacial y Defensa de Dassault Systèmes, cree que sí aunque sostiene que es una tarea compleja que requerirá mucho trabajo y avances.
«La descarbonización del sector aeronáutico implica avances tecnológicos, mejoras operativas, el uso provisional de combustible de aviación sostenible y el hidrógeno como futura opción. Es necesario desarrollar iniciativas y acciones en la fabricación de aeronaves NetZero mediante la investigación e innovación en propulsión de hidrógeno, híbrida y eléctrica. Por ejemplo, el uso de pilas de combustible y turbinas de hidrógeno, aunque aún en desarrollo, muestra un gran potencial para el futuro de la aviación sostenible. La implementación de estas tecnologías, manteniendo controlados los costes, especialmente los de certificación, será fundamental. Además, la industria debe centrarse en mejorar la eficiencia operativa mediante normas de gestión del tráfico aéreo, sistemas de navegación directa y la optimización de trayectorias de vuelo», asegura Ziegler.
La gran apuesta de Dassault Systèmes con la plataforma 3DEXPERIENCE
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ha denunciado que el modelo de descarbonización impuesto por la Unión Europea es contraproducente. Denuncia que su coste es tan alto, por los crecientes impuestos, que el sector se queda sin recursos para poder invertir en soluciones verdes. De hecho, aerolíneas como Lufthansa ya empiezan a trasladar el coste de la tasa climática a sus clientes directamente.
En este sentido, Dassault Systèmes aporta soluciones innovadoras para rebajar costes a la par que se reduce la huella de carbono. La compañía ha impulsado la plataforma 3DEXPERIENCE. Un sistema que «facilita la colaboración, la innovación y la eficiencia desde el desarrollo del producto hasta su certificación. Permite crear gemelos virtuales para simular y validar los diseños antes de la producción física. De esta forma, los fabricantes de aviones pueden integrar aspectos físicos y de comportamiento del mundo real con pruebas virtuales, reduciendo costes, residuos y emisiones, y acelerando el tiempo de comercialización de nuevos modelos».
Ziegler añade que «la plataforma 3DEXPERIENCE apoya la inteligencia de mercado y la planificación logística, garantizando que todas las partes interesadas estén alineadas y puedan responder rápidamente a los cambios del mercado. Al permitir la integración y verificación de sistemas completos, Dassault Systèmes asegura que las nuevas tecnologías se adopten sin problemas y de manera eficaz en todo el ecosistema, ayudando a la industria a cumplir sus objetivos de sostenibilidad pese a los obstáculos económicos y logísticos».
Retos de la aviación sostenible
Dassault Systèmes identifica una serie de retos en el área de la sostenibilidad: «los altos costes de las nuevas tecnologías, la necesidad de un cambio sistémico en el ecosistema aeronáutico y la integración de nuevos sistemas en diseños de aeronaves existentes». Unos desafíos a los que Dassault Systèmes hace frente «proporcionando herramientas avanzadas de simulación y validación, que ayudan a los fabricantes a optimizar diseños y mejorar la eficiencia. Varias empresas líderes ya utilizan el modelado y la simulación basados en la ciencia (MODSIM) para reducir el ciclo de desarrollo del producto».
Vías hacia la aviación sostenible
David Ziegler sostiene que, a corto y medio plazo, la industria debe trabajar de forma paralela «en el desarrollo de la próxima generación de aviones como en la mejora de la sostenibilidad de las flotas actuales». Pone como ejemplo las inversiones en «propulsión eléctrica híbrida y la propulsión por hidrógeno, que, aunque se encuentran en sus primeras fases, tienen un gran potencial y requieren investigación y desarrollo continuos».
Por otro lado, señala otros caminos para hacer que el medio de transporte sea más eficiente: «se pueden optimizar las operaciones de vuelo y tierra, aplicando el concepto de ‘Cielo Único Europeo’, y digitalizar el control del tráfico aéreo para mejorar la eficiencia del tráfico y del espacio aéreo. La red de valor de la aviación debe ampliarse para incluir otras industrias, lo que requiere la colaboración entre los sectores de la automoción, la energía y la aviación. La plataforma 3DEXPERIENCE apoya la innovación sostenible a nivel de producto y ayuda a los fabricantes a desarrollar un ecosistema global y cooperativo con todos los participantes en la cadena de valor, fomentando una industria verdaderamente competitiva y sostenible».
Los proyectos verdes de Dassault Systèmes
El compromiso de Dassault Systèmes con la aviación sostenible y eficiente es claro. En este contexto está inmerso en varios proyectos. Utiliza la plataforma 3DEXPERIENCE «para acelerar el desarrollo y despliegue de tecnologías de aeronaves de hidrógeno para sistemas energéticos propulsivos o no propulsivos. Estos aviones, propulsados por hidrógeno, podrían equiparse con pilas de combustible para motores eléctricos, ofreciendo una solución de emisiones casi nulas, o con turbinas de combustión de hidrógeno, que, aunque requieren modificaciones en los motores, el almacenamiento y la distribución del combustible, se presentan como una alternativa prometedora para mejorar el rendimiento medioambiental».
Se trata de un proyecto complejo sobre todo por el almacenamiento del hidrógenoque «requiere depósitos mucho más grandes y la gestión de temperaturas extremadamente bajas. Habría que replantearse todo el ecosistema«.
En esta tarea el uso de gemelos virtuales es clave: «facilita a las partes interesadas simular y validar diseños antes de la producción física. Creemos que, en el futuro, las experiencias de gemelos virtuales serán generativas. Aunque llevamos 20 años utilizando la Inteligencia Artificial a través del diseño generativo, la visión por ordenador y el análisis de grandes volúmenes de datos, estas tecnologías avanzan ahora rápidamente. La clave está en aprovechar los datos, contextualizarlos y, en última instancia, convertirlos en conocimiento y experiencia.»
Fuente: aviaciondigital.com