(Aeronoticias).- «¿Qué han hecho con nuestro gran museo…? Esto es ahora un fiasco… Una estafa!” exclamó sin poder reprimirse un anciano que llevó a sus dos nietos europeos al local de la avenida Javier Prado con la ilusión de que los niños extranjeros puedan admirar el esplendoroso pasado inca que precedió a la creación del Perú.
En vez de espectaculares representaciones de esa historia deslumbrante, lo que halló fueron amarillentas láminas, tejidos ancestrales y huacos desperdigados, lo que le causaron decepción y hasta amargura al ver frustrada su intención de maravillar a sus descendientes europeos.
Su decepción fue compartida por los mismos empleados de esto que se llama Museo de la Nación, título que en verdad le queda muy grande al local de la avenida Javier Prado donde ahora se realizan encuentros internacionales como la III Cumbre ASPA. Aquella que fue testigo del “roche” que le hizo la Primera Dama, Nadine Heredia , a su esposo, Ollanta Humala, Presidente de la República, escena que la televisión de todo el mundo perennizaron para la historia.
Creemos que algo tiene que hacer el titular del Ministerio de Cultura para volver a poner en su sitial a lo que fue el verdadero Museo de la Nación… aunque sea quitarle este título y ponerle simplemente museo.
