Según reveló la cadena pública BBC, el Tesoro británico baraja varias opciones, entre ellas un «super-impuesto» a los banqueros que reciban retribuciones de un cierto nivel. Se estima que podría recaudarse unos 1.000 millones de libras anuales.
Otras ideas que se analizan es aumentar el impuesto de la seguridad social de los empleados de bancos que paguen grandes primas, o gravar directamente las inversiones de las entidades bancarias.
Según el diario El Mundo, el impuesto en cuestión se aplicaría durante dos o tres años y afectaría no sólo a bancos del Reino Unido, como Barclays, HSBC o Royal Bank Of Scotland (RBS), sino también a las filiales británicas de firmas extranjeras como Goldman Sachs, JP Morgan o Deutsche Bank.
Aeronoticias considera que, en un anuncio de la medida adoptada finalmente podría hacerse este miércoles, cuando el ministro de Economía, Alistair Darling, presentará un adelanto de los presupuestos generales del Estado para el próximo ejercicio, según la BBC.