El gobierno español aprobó el viernes un controvertido plan antipiratería que permitirá cerrar, mediante un procedimiento judicial urgente, las páginas de Internet que ofrezcan descargas ilegales de música o películas.
El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, explicó que el proyecto incluirá la creación de un grupo de expertos, bautizado como la Comisión de Propiedad Intelectual, que se encargará de recibir las quejas de la industria del entretenimiento y particulares.
Esta comisión, que dependerá del Ministerio de Cultura, enviará los expedientes de páginas de descargas que considere ilegales a un juez, que tendrá cuatro días para escuchar a las partes y decidir si cierra o no el sitio.
La medida, rechazada por las asociaciones de internautas, fue aprobada en la reunión semanal del gabinete y pretende responder a las reclamaciones de la industria y del mundo de la cultura, que aseguran estar perdiendo millones de dólares en derechos de propiedad intelectual y ventas por culpa de la piratería en Internet.