(Aeronoticias).-El pacto para solucionar el conflicto laboral en Iberia, que lleva 10 jornadas de huelga 10 y tiene más de 3.000 empleos en liza, se encontró el último domingo la mitad del camino despejado. El Consejo de Administración de International Airlines Group (IAG), el holding propietario de la aerolínea española y British Airways, aceptó la propuesta del mediador de la disputa, que suaviza por así decirlo considerablemente el recorte de empleo planteado por la compañía.
Cabe precisar que Iberia presentó en febrero un recorte de 3.800 puestos de trabajo, el 19% de la plantilla, y unas rebajas salariales que oscilaban entre el 25% y el 35%, mientras que el mediador del conflicto, el catedrático Gregorio Tudela, planteó limitar los despidos a 3.141 (el 16% del total) y una rebaja salarial media del 7% para el personal de tierra y del 14% para tripulantes de vuelo y pilotos, así como una congelación de sueldos hasta 2015. Además, en esta vía se aplicarían las condiciones del expediente de regulación de empleo (ERE) que la aerolínea tiene en vigor desde 2001 y que prioriza las prejubilaciones y las bajas incentivadas.
Sin embargo, los que tienen que decidir si aceptan o no el trato, ahora son los sindicatos, lo que conllevaría la desconvocatoria de las huelgas previstas entre el 18 y el 22 de marzo y la retirada del ERE con los despidos que plantea la compañía.
La propuesta del catedrático mediador guarda claras similitudes con la que Iberia y los representantes de los trabajadores llegaron a esbozar el pasado mes de enero, pero no llegó a concretar. Por ello, aunque los sindicatos seguían el domingo por la noche reunidos para discutir si daban luz verde al plan de ajustes propuesto por el catedrático, algunas fuentes allegadas al conflicto consideraban que se había facilitado claramente la vía al acuerdo. El plan de Tudela señala también la necesidad de una negociación posterior para pactar aumentos de jornada y un aumento de la flexibilidad.
Como se recuerda Iberia puso los despidos sobre la mesa ya el pasado mes de noviembre, cuando anunció la necesidad de recortar hasta 4.500 puestos de trabajo, una cuarta parte de todo su personal, si bien luego redujo la cifra en 700 empleos. El consejero delegado de la empresa, Rafael Sánchez-Lozano, señaló que la compañía perdía 1,7 millones de euros diarios y debía aplicar un fuerte tijeretazo a flota y rutas. Los sindicatos, sin embargo, lamentaban que la fusión con British Airways estaba desfavoreciendo a la aerolínea española. La compañía ha perdido más de 850 millones de euros entre 2008 y septiembre de 2012.
El sí que acaba de dar IAG a la propuesta tiene lugar después de una tensa negociación con la plantilla, en la que llegó a trascender cierta división de opiniones entre los miembros españoles y los británicos en el Consejo de Administración sobre el ritmo y las condiciones del ajuste.
“El Consejo de Administración de International Airlines Group (IAG) se ha reunido en sesión extraordinaria para analizar y valorar la propuesta emitida por el mediador en relación con Iberia. Como resultado de lo anterior, el Consejo de Administración ha decidido aceptar la referida propuesta”, señaló hoy escuetamente la nota comunicada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).