(Aeronoticias).- María Pía era una niña de baja estatura y nada agraciada, pero muy inteligente, de noble y gran corazón. Muy estudiosa y servicial, siempre ayudaba a sus compañeros de clase y a todas las personas que le solicitaban algún favor.
María Pía tenía un gran complejo de inferioridad debido a su baja estatura. Veía a sus amigas y amigos, altos guapos, bellos y ella al mirarse al espejo se veía tan pequeña, tan si gracia y sin nada que admirar… y su complejo que la retraía y atormentaba.
Conforme pasaba el tiempo su inteligencia y su personalidad se robustecía. Venciendo todos los obstáculos, con actitud mental positiva logró su profesión y superó sus temores, prejuicios y conflictos interiores, porque comprendió que lo que vale en las personas es su belleza interior, el cultivo de los valores y el servicio alegre y desinteresdo a los demás.
Se casó con un hombre muy bueno, guapo y de gran solvencia económica.
Como María Pía, sepamos vencer y superar nuestros temores, traumas y complejos que nos impiden ser felices. Y recordemos que lo que vale en el ser humano es la belleza interior, la decisión firme y perseverante para lograr superarnos y triunfar en la vida dando a los demás lo mejor que tenemos de nosotros mismos, porque “Dios no se deja ganar en generocidad” y a su tiempo seremos recompensados.
Hida Altamirano Abregú.