(Aeronoticias) Los drones comerciales se han convertido en un auténtico quebradero de cabeza para la industria de la aviación. Una industria que ha mostrado su preocupación en diversas ocasiones ante lo que podría suceder si un dron colisiona contra el parabrisas de un avión o contra el motor del avión. Por esa misma razón, durante los últimos años se han impuesto diversas medidas para evitar que los drones vuelen cerca de los aeropuertos, garantizando así la seguridad de los vuelos comerciales.
Sin ir más lejos, en España, los vuelos con drones están regulados por una ley. Según los artículos 50 y 51 de la ley 18/2014, está prohibido volar a menos de 15 kilómetros de un aeropuerto dotado con un sistema de aproximación instrumental (la gran mayoría de ellos) y a menos de 8 kilómetros en el caso de los aeropuertos que no cuenten con este sistema. Por esa misma razón, se considera ilegal volar un dron en las inmediaciones de los aeropuertos españoles.
En busca de una imagen única
Lo mismo sucede en otros países como Estados Unidos, donde también está regulado que los drones no puedan volar cerca de los aeropuertos. Sin embargo, varias son las personas que deciden saltarse las leyes con el objetivo de captar imágenes únicas. Así lo demuestra el último vídeo subido a Facebook por James Jayo Older, un aficionado a los drones que decidió sobrevolar un avión comercial con su dron para grabar su aterrizaje en el aeropuerto de Las Vegas.
Tras la polémica suscitada, Older decidió borrar el vídeo de sus redes sociales. Sin embargo, un usuario lo ha recuperado y lo ha subido a un hilo de Reddit, donde se ha denunciado su actuación. De hecho, el vídeo ha llegado a manos de la Agencia Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA), que ha comenzado a investigar el incidente. Después de borrar el vídeo, el aficionado explicaba en su cuenta de Facebook que, en realidad, se encontró una tarjeta de memoria y que el vídeo estaba grabado dentro. Ahora, la FAA trabaja para descubrir qué fue lo que sucedió durante el pasado jueves.
Penas de hasta 3 años de cárcel
La Ley de la Administración Federal de Aviación Americana prohíbe a una persona operar un dron cerca de un avión por motivos recreacionales, como es el caso de Older. En caso de no cumplir la ley, el infractor puede ser castigado con una multa de 1.437 dólares (en caso de que sea considerada infracción leve) y hasta 32.666 dólares en caso de que sea más grave. Por otro lado, la ley federal establece penas de hasta 3 años y multas de hasta 250.000 dólares a aquellas personas que vuelan drones en condiciones de riesgo.
La comunidad Drone U, que ha compartido la grabación a través de su cuenta de Facebook, ha explicado que este episodio “tiene el potencial suficiente como para desacreditar a toda la industria de los sistemas de aeronaves no tripuladas”. Por esa misma razón pide “un castigo rápido y justo para este ejemplo de vuelo irresponsable e imprudente”. Mientras tanto, en declaraciones a KLAS, la FAA confirma que está investigando el suceso con el objetivo de encontrar al responsable de esta temeridad.
Por: David Justo – CadenaSer
