(Aeronoticias) En el marco del proyecto europeo LIFE Zero Cabin Waste, entidades tales como Iberia, Ecoembes, Ferrovial Servicios, Gate Gourmet y ESCI-UPF, han apostado de lleno por sumar esfuerzos para introducir la sostenibilidad en los vuelos e implantar en los mismos la recogida selectiva de residuos a fin de propiciar su posterior reciclado.
Nueva operativa para recuperar el 80% de la basura
El sistema ya comenzó a implantarse el pasado mes de octubre en vuelos operados por Iberia a nivel nacional. Es el caso de los que conectan Madrid y Barcelona, incluyendo destinos tales como Bilbao y A Coruña. Asimismo, se está llevando a cabo en algunas rutas europeas como Londres, Roma, París, Ginebra, Zúrich, Viena, Dusseldorf y Oporto. La pretensión es ir extendiendo la recogida selectiva a otros destinos hasta lograr que en la totalidad de los vuelos de Iberia se instaure el reciclaje.
Con tal fin, la compañía dispone en sus aviones de carros compartimentados para posibilitar, por un lado, la separación de envases plásticos, latas y briks y, por otro, los envases de papel y cartón. De esta forma, los residuos son recepcionados, ya clasificados, en las instalaciones de Gate Gourmet en el Aeropuerto de Madrid Barajas-Adolfo Suárez, siendo entregados posteriormente a gestores autorizados para su reciclado y transformación en nuevas materias primas.
El nuevo modelo es objeto de especial seguimiento por parte de Ecoembes. Así, la Cátedra UNESCO de Ciclo de Vida y Cambio Climático de ESCI-UPF evalúa su efectividad a la hora de reducir el impacto ambiental, y, a través de la metodología del Análisis de Ciclo de Vida, se cuantifica la mejora en cuanto a huella de carbono.
Ferrovial Servicios se encuentra trabajando en un tratamiento alternativo para los residuos orgánicos producidos en los vuelos no comunitarios, ya que la próxima fase del proyecto será implantar también la segregación en vuelos de largo recorrido. Con este nuevo sistema se confía en recuperar el 80% de los desechos generados a bordo de los vuelos y transformarlos en recursos, bien a través del reciclado, cuando ello sea posible, el compostaje de la materia orgánica o bien la valorización energética de la fracción no reciclable.
La gran proyección de esta iniciativa propiciará que sea replicada por otras aerolíneas europeas. De hecho, y según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo, en las cabinas de los aviones se generan anualmente alrededor de 5,7 millones de toneladas de basura. Lograr un modelo universal permitiría ganar en eficiencia.
Fuente: Ecoticias