(Aeronoticias).- La industria aérea mundial obtendrá un beneficio económico de aproximadamente 3.000 millones de dólares (2.375 millones de euros) en 2012, menos de la mitad que el año pasado, cuando la industria ganó 7.900 millones de dólares (6.254 millones de euros), y pese a una bajada en el precio del combustible, que amenazaba con lastrar el resultado anual, según la última previsión de la Asociación Internacional de las Líneas Aéreas (IATA, por sus siglas en inglés). Pese a la reducción en más de la mitad de estas previsiones con respecto al resultado final del año pasado, la IATA ha destacado que se trata de una noticia «positiva», ya que en su anterior pronóstico, la asociación, que representa al 93% del sector, vislumbraba un escenario en el que el signo de las ganancias podía tornarse negativo, debido al continuo incremento del precio del barril.
“Nuestra preocupación ahora no es tanto el coste del queroseno, que sigue siendo alto, sino la crisis en la Eurozona, en general, y la crisis bancaria de algunos países europeos, en particular”, ha señalado el consejero delegado de la IATA, Tony Tyler, en el transcurso de la 68 asamblea general de la asociación y la Cumbre Internacional de Transporte que tienen lugar este lunes y martes en la ciudad de Pekín.
Según este análisis, este año será el segundo año consecutivo con caídas en los beneficios del sector, tras el pico alcanzado en 2010, cuando las aerolíneas ganaron 15.800 millones de dólares (unos 12.500 millones de euros). El margen de beneficio previsto para este año es solo del 0,5%, ocho décimas por debajo del obtenido el año pasado (1,3%).
En cuanto a la facturación, la IATA prevé que la industria logre unos ingresos operativos por valor de 631.000 millones de dólares (500.000 millones de euros), una cifra muy ajustada con respecto a la de los costes operativos, de 623.000 millones de dólares (493.000 millones de euros), que resulta en un resultado de explotación (Ebit) de 8.600 millones de dólares (6.808 millones de euros), “unas estrechas ganancias a las que hay que restar impuestos, intereses y otras operaciones financieras”.
“La cifra de nuestra previsión para el resultado anual no se ha alterado, aunque sí lo han hecho casi todos los factores que llevan a esa ecuación. El tráfico de pasajeros ha mejorado, el negocio de carga ha dejado de caer y el promedio de coste de combustible se ha reducido, pero la crisis de la deuda soberana en la zona euro se ha acentuado, lo cual ha dañado al crecimiento regional y general”, ha explicado Tyler.
Tradicionalmente, la industria aérea ha entrado en ‘números rojos’ cuando el PIB mundial crecía por debajo del 2%. De ahí el “miedo” generado hace unos meses dentro el sector cuando el PIB mundial estimado para este año se establecía en torno al 2% mientras el incesante encarecimiento del crudo menguaba la rentabilidad de las compañías.
Así, la revisión al alza del PIB mundial hasta el +2,1%, unida a las caídas recientes del precio del Brent, por debajo de los 100 dólares por barril, han sido los principales responsables de unas mejores expectativas para el sector. Todo ello, ha repercutido asimismo en la previsión relativa a la demanda de pasajeros, que la IATA calcula en tres billones para 2012, frente a los 2,83 billones de viajeros del año pasado.
Las europeas lideras las pérdidas
Por regiones, las compañías aéreas de Europa serán las que generen más pérdidas en el sector a nivel mundial. Así, la cifra de 600 millones de dólares de ‘números rojos’ (-475 millones de euros) que la IATA vaticinaba hace tan solo tres meses, se ha duplicado debido al “entorno macroeconómico en que se desenvuelven las compañías”, hasta prever unas pérdidas valoradas en 1.100 millones de dólares (870 millones de euros).
La demanda de pasajeros continuará siendo “débil”, con un incremento del 2,3%, “una caída significante tras la expansión del 6,7% de 2011″. “Algunas de las mayores economías de la región, como España y Reino Unido, ya se encuentran en recesión. Además, muchas aerolíneas de estos países se están viendo afectadas por subidas en las tasas aéreas y por regulaciones mal estudiadas”, ha lamentado Tyler.
Por contra, la IATA espera que el continente asiático ‘salve’ el resultado global mediante su contribución al sector con 2.000 millones de dólares (1.583 millones de euros) de beneficios, pese a que esta cifra es un 13% inferior al pronóstico de marzo para 2012 y menos de la mitad que lo que las aerolíneas asiáticas ganaron el año pasado –3.880 millones de euros–.
“Pese a la ralentización de las compañías chinas e indias, y gracias al relanzamiento del mercado japonés tras el tsunami del año pasado, confiamos en que la demanda regional crezca en torno al 3,9%, al mismo tiempo que la capacidad haga lo propio en un 3,3%”, ha añadido el responsable de la IATA.
Gracias a la mejora en los ingresos por pasajero y a una gestión más eficaz, las previsiones para Norteamérica han pasado de 900 millones de dólares (712 millones de euros) en marzo a 1.400 millones de dólares (1.108 millones de euros) en el pronóstico anunciado este lunes en Pekín, superando incluso las ganancias de 1.300 millones de dólares (1.030 millones de euros) generadas el año pasado.
Las aerolíneas de Medio Oriente reportarán un beneficio de 400 millones de dólares (316 millones de euros), tras una ligera revisión con respecto al anterior pronóstico, que preveía para la región unas ganancias de 500 millones de dólares (casi 400 millones de euros), lo que supone, en todo caso, reducir a la mitad los beneficios del año pasado. Pese a ello, las compañías del Golfo serán las gran beneficiadas en el negocio de carga, tras haber sido responsables del 80% de este segmento durante el primer semestre.
Por su parte, las aerolíneas sudamericanas y africanas apenas tendrán cambios con respecto a la anterior revisión de la IATA. Así, en Latinoamérica la industria aérea ganará 400 millones de dólares (317 millones de euros), 100 millones de dólares (79 millones de euros) más que en 2011, gracias a la reducción en la capacidad de las compañías brasileñas y la consecuente mejora en el ingreso unitario por pasajero.
Por último, las aerolíneas africanas perderán 100 millones de dólares (79 millones de euros), tras el punto de equilibrio alcanzado en 2011. Esta pérdida se debe fundamentalmente a la debilidad del mercado europeo, que afectará a la llegada de viajeros internacionales a África.
Recuperación en el negocio de carga
Según la última previsión de la asociación, el negocio de carga ha salido “por fin” de los retrocesos continuados a lo largo de los últimos años y tras una “dura caída” el año pasado. Esto ha sido posible gracias a una mejora moderada en la confianza de las economías no europeas.
“Esta recuperación, si bien ha sido débil, se ha producido gracias a los aumentos significantes en Oriente Medio. La debilidad económica de Europa limitará cualquier mejora sustancial en lo que queda de año”, ha avisado Tyler.
En total, la previsión de la IATA es que el segmento de carga transporte 47,8 millones de toneladas en 2012, prácticamente lo mismo que el año pasado, cuando se transportaron 47,7 millones de toneladas en mercancías.
Dentro de este contexto alentador para la economía del transporte aéreo mundial viene creciendo el interés del sector privado en el nacimiento de la línea aérea de bandera del Perú “Aerolíneas Contigo Perú” cuyo nombre comercial es Aerolíneas del Perú que fuera parte del mensaje presidencial del presidente Ollanta Humala del Perú en la asunción de mando en el Congreso de la República el 28 de julio de 2011, cuando dijo: “Tomaremos las medidas necesarias para que el Perú tenga su línea aérea de bandera y que el mercado aéreo comercial sea más abierto y de mayor competencia, sobre todo para abaratar y ampliar la comunicación al interior del país”.
Asimismo, el presidente de Aerolíneas del Perú Julián Palacin Fernández en su libro “Línea aérea de bandera de bajo costo” presentado en el auditorio José León Barandiarán del ilustre Colegio de Abogados de Lima el 29 de noviembre de 2011, expresó: “Nuestra aerolínea de bandera será simplemente un sueño o tal vez una realidad, o un mensaje para las nuevas generaciones que quieran recuperar la soberanía perdida en el espacio aéreo peruano”.