Volar es malo para el medio ambiente, pero algunas aerolíneas son mejores que otras en limitar el daño.
Ninguna aerolínea está haciendo suficiente para reducir sus emisiones de carbón a largo plazo, pero Delta y United llevan la delantera en el manejo de sus emisiones de gases invernadero y los riesgos relacionados con el cambio climático, de acuerdo con un nuevo reporte publicado el martes.
EasyJet, línea europea, es la aerolínea que menos produce emisiones de carbón por kilómetro recorrido por pasajero, de acuerdo con el reporte.
El estudio del Instituto de Investigación Grantham de la Escuela de Economía de Londres concluyó que ninguna de las 20 aerolíneas más grandes del mundo que cotizan en las bolsas está haciendo suficiente para detener el cambio climático.
La investigación fue financiada por Transition Pathway Initiative, un grupo de inversión con 13 billones de dólares en activos que incluyen a BNP Paribas y Aviva.
También dijo que el sector de la aviación debe incrementar sus esfuerzos para reducir la cantidad de gases invernadero que produce, en lugar de depender de un mecanismo que los contrarresta que les permite permutar emisiones de carbón con otras industrias.
Además de Delta y United, el reporte también señaló a Lufthansa de Alemania y ANA Group de Japón por ser las empresas que más lejos han llegado en sus esfuerzos por detener los riesgos producidos por el cambio climático. Qantas de Australia, Alaska Air y United tuvieron una buena calificación en sus emisiones de carbón, junto a EasyJet.
Pero ANA tuvo una mala calificación en ese aspecto, al igual que Korean Air y Japan Airlines. El reporte menciona factores como la edad de la flota, la mezcla de vuelos largos y cortos, la cantidad de carga que llevan y la densidad de asientos que afectan la cantidad de emisiones de carbón por pasajero.
United, Delta, Lufthansa y ANA han tomado nota de los riesgos que supone el cambio climático a sus negocios dentro de sus estrategias corporativas, un paso que los inversionistas demandan cada vez más de las empresas a lo largo de diversas industrias.
Sin embargo, el estudio dijo que sólo Delta y Lufthansa han vinculado los objetivos de cambio climático al salario ejecutivo, otra de las exigencias comunes de los inversionistas.
“El sector de la aviación está haciendo lo básico con relación a su desempeño de carbón, pero los inversionistas los están instando a tomar medidas más significativas a la vez que juzgan qué aerolíneas tienen mayor probabilidad de sobrevivir a la turbulencia de la transición a una economía de bajo carbono”, dijo Faith Ward, copresidenta de Transition Pathway Initiative.
Korean Air, Southwest y American Airlines se encuentran entre las empresas identificadas por el estudio como rezagadas en las estrategias sobre el cambio climático y las metas a largo plazo.
Sin embargo, Southwest tuvo una buena calificación en el rubro de eficiencia de carbón. American dijo estar “tomando medidas significativas para reducir su huella de carbono”.
Sólo una aerolínea en camino
Algunas de las principales aerolíneas del mundo no formaron parte de este estudio. Esto se debe a que no cotizan públicamente (Qatar Airways y Emirates), o porque no tienen suficientes acciones disponibles para inversión extranjera (Ryanair).
El estudio también investigó si los planes actuales de las aerolíneas sobre la reducción de las emisiones de carbono se alineaban con las promesas internacionales tales como el acuerdo climático de París. El estudio afirma que sólo EasyJet estaba encaminada a cumplir con esas promesas después de 2020.
El sector de aerolíneas representa actualmente el 2% de las emisiones mundiales de CO2. La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés) espera que el número de pasajeros que viajen por aire se duplique a 8,200 millones para 2037, lo cual podría significar mayores emisiones.
Un portavoz de la IATA dijo que la asociación busca que las aerolíneas incrementen su inversión en nuevas tecnologías que vuelvan más eficientes los vuelos. Sin embargo, él añadió que no sólo depende de las aerolíneas el ser más eficientes.
“El sistema de control de tránsito aéreo actual es anticuado y necesita modernizarse. Esto llevará a rutas más eficientes”, agregó.
La industria también argumenta que las aerolíneas tienen que depender de las compensaciones a corto plazo, pues no existe la tecnología que pueda reemplazar los combustibles actuales, a diferencia de la industria automovilista que cada vez más depende de la electricidad.
Fuente: CNN.