(Aeronoticias).- La gran expectativa que había por el cartel de la corrida de ayer se reflejó en la excelente entrada que presentaba Acho a las tres y treinta de la tarde, hora en que se inició el festejo con más de tres cuartos de plaza en los tendidos.
Parten plaza Enrique Ponce, de berenjena y oro, El Fandi de verde menta y oro y Miguel Ángel Perera, de rosa y oro. Como es costumbre, los matadores son obligados a salir al tercio a saludar, correspondiendo a la ovación que se les tributa al término del paseíllo.
El ganado de La Ahumada, de tan buenos resultados en años anteriores, ha fallado este año. Los de ayer -salvo el tercero que embistió con nobleza-, en general resultaron mansos, saliéndose sueltos de los engaños y algunos desarrollando sentido y tornándose peligrosos, lo que se demostró por las aparatosas volteretas sufridas por dos diestros que rara vez son cogidos como Enrique Ponce y El Fandi, éste último recibiendo una cornada. Asimismo, cabe mencionar que los ejemplares de La Ahumada tuvieron una dispareja presentación, algunos con poca presencia, especialmente el segundo de la tarde, el cual fue muy protestado por el público.
Enrique Ponce demuestra su maestría cada tarde. Su primero -jabonero de pelo-, se sale suelto desde el inicio. El diestro de Chiva torea bien de capote y con la muleta se va haciendo de él a base de consentirlo y mandar en el ruedo. Ponce insiste en demasía a pesar de que el toro comienza a desarrollar sentido, hasta que se produce la aparatosa cogida con rotura de la taleguilla. El torero acusa el fuerte golpe pero vuelve al toro y se adorna toreramente. Mata de estocada desprendida y corta una oreja. Se retira a la enfermería de la cual sale cuando se lidiaba el tercero de la tarde, vistiendo un pantalón de color beige con el cual termina la corrida. El cuarto toro es bonito de tipo, pero manso y difícil. Nada con el capote y con la muleta el diestro intenta la faena, que el toro imposibilita, buscando colarse en cada pase. Ponce termina con pases de castigo y nuevamente una estocada desprendida acaba con el toro. Su labor es silenciada.
El Fandi ha tenido ayer muy mala suerte con su lote. Su primero -muy protestado por su poca presencia-, impide mayor lucimiento a su matador, tanto en el capote como en las banderillas. Sin embargo, el torero granadino nos muestra con la muleta el sitio que ha alcanzado este año, instrumentando algunas buenas series con ambas manos. Media estocada desprendida, un pinchazo y un descabello terminan con su enemigo, siendo silenciada su labor. El quinto se muestra muy difícil desde la salida, pegando constantes arreones. Nada con el capote y luego El Fandi coge las banderillas , siendo destacado el último par por los adentros. Inicia la faena muy pegado a las tablas y trata de sacar faena al manso que cada vez se va tornando más peligroso. El torero insiste y llega la cogida, notándose desde un principio que el toro había calado la pierna del torero, quien, sin embargo, permanece en el ruedo hasta matar al burel. Se retira a la enfermería entre aplausos. Al concluir la corrida, el Dr. Andrés León Martínez –jefe del servicio médico de Acho-, nos informa que la cornada ha sido en el tercio inferior de la cara posterior del muslo derecho, con dos trayectorias, una ascendente y otra descendente de 8 cm. y 6 cm., respectivamente. El matador es operado en la enfermería bajo anestesia general y, al término de la intervención, es trasladado a una clínica local. Pronóstico menos grave. Nos hemos informado que la cogida impide el viaje que debía realizar El Fandi a Quito, donde está programado para torear hoy lunes, así como el jueves, viernes y sábado de esta semana.
Miguel Ángel Perera, recibe por verónicas jaleadas al tercero de la tarde, muy noble pero con poca presencia. Emociona un quite ceñido por gaoneras. Con la muleta realiza una faena que empieza en los medios con cambiados y pases por alto muy ligados y luego por redondos y naturales. Es buena la faena, pero lamentablemente el diestro pierde los trofeos al matar de un bajonazo. Hay petición de oreja que el palco, a nuestro juicio con buen criterio, no concede. El sexto -jabonero sucio de pelaje-, es el de más presencia del encierro. Se sale suelto con el capote y luego llega a la muleta con cierta nobleza, pero a poco de iniciada la faena se lesiona de la mano derecha, viéndose obligado Perera a abreviar su labor. Clava un pinchazo hondo y mientras el toro se amorcilla en tablas, el torero solicita un toro de regalo que la presidencia rechaza. Mata Perera con el descabello y el torero vuelve a insistir con la solicitud de regalo, que es firmemente denegada, ocasionando que el público abronque injustamente al Juez. Nuevamente creemos que el palco estuvo acertado, porque el Reglamento es claro respecto a los toros de regalo y ello debería ser entendido por el público.
Queda sólo una corrida para el término de la Feria del Señor de los Milagros de este año y, por ello, invitamos al público a que asista a Acho el día domingo. El ganado nacional de Roberto Puga y la participación de Enrique Ponce, El Juli, Sebastián Castella y Cayetano Rivera Ordoñez, prometen un maravilloso espectáculo.