(Aeronoticias).- El domingo 30 de Enero, fecha en que el mejicano Eulalio López “El Zotoluco” toreaba su corrida número 1000, la monumental de Insurgentes tuvo como gran protagonista a Julián López “El Juli”, quien alcanzó un éxito rotundo cortando tres orejas y un rabo. Por su parte, El Zotoluco cortó oreja en cada toro y salió en hombros.
Hemos visto la grabación de la corrida en la transmisión que realiza El Canal de las Estrellas, ahora Canal 16 de Cable Mágico, y en base a ello presentamos nuestra opinión sobre el festejo.
Con la plaza presentando una excelente entrada, partieron plaza El Zotoluco, de berenjena y oro, El Juli de azul celeste y oro y Octavio García “El Payo” de negro y oro. Hay homenaje inicial a Zotoluco por su corrida número mil. El veterano torero muy en su estilo logró sacar partido a base de entrega y conocimiento a sus dos toros, cortando una oreja en cada uno de sus toros, aunque en el primero la oreja fue protestada. Parece que en la capital tratan ahora muy duramente a este buen torero que a base de entrega y conocimiento ha llegado a ubicarse como una de las principales figuras de su país.
El Payo tuvo una floja actuación. Estuvo acelerado y sin recursos ante dos toros que no presentaban mayores dificultades. Este torero es una de las esperanzas jóvenes de la coletería mejicana, pero en esta corrida estuvo francamente mal. Se vuelve a presentar el día lunes en la segunda corrida por el aniversario de la plaza y tendrá la ocasión de desquitarse, pero para ello tendrá que cambiar de actitud.
El Juli hizo una demostración más del gran momento que atraviesa, de la plenitud y maestría que ha alcanzado y que, a nuestro juicio, lo han colocado en el más alto nivel del toreo actual. Realizó una gran faena al quinto de la tarde poniendo de pie a la multitud, pero siendo tan buen estoqueador, falló a la hora de la verdad y lo que era triunfo apoteósico quedó en una ovación. Picado en el amor propio, regaló uno de los sobreros y volvió a estar en plan de torero grande. Gran faena a un toro al que se le dio merecida vuelta al ruedo, al que mató de una estocada entera motivando que la enfervorecida multitud lo aclamara otorgándosele las dos orejas y el rabo y logrando un gran triunfo.
Mención especial queremos hacer de la primera faena de El Juli al segundo de la tarde, al cual cortó una oreja que fue protestada. Particularmente, nos gustó mucho esta faena de sabor añejo, faena de las que no se ven mucho en estos tiempos y que los nuevos aficionados o el público no muy entendido no suele valorar. El toro era bastante complicado por su tendencia a recular permanentemente y a tirar gañafones al remate de cada pase y buscando lo dejaba detrás. A nuestro criterio, el toro debió recibir una vara más. Allí vimos, entonces, a un torero poderoso y valiente que le plantó cara y sacó pases en series que parecía no tener el toro. Terminó castigando con pases de pitón a pitón que trajeron a nuestra mente reminiscencias de tiempos pasados. No importa que se protestara la oreja, pues lo importante es lo que ha quedado en nuestro recuerdo.
El ganado de Xajay muy bien presentado, con toros muy interesantes y bravos. De lejos el mejor ganado que hemos visto en la temporada mejicana.
