(Aeronoticias).- El cierre del tráfico aéreo del Aeropuerto de Eindhoven (Holanda) durante la ceremonia fúnebre en conmemoración a los fallecidos en el derribo del Boeing 777 de Malaysia Airlines puso furioso a un piloto de la aerolínea Ryanair cuando pretendía aterrizar al momento del ritual.
«Estuve en el monitor y de súbito oí esta discusión», señaló el expiloto René Veldhuizen, testigo de la discusión ocurrida durante el funeral. El avión había salido del Aeropuerto de Brindisi (Italia) y se preparaba para irse a tierra, cuando le denegaron el permiso de aterrizaje.
«Esto es inaceptable», señaló el piloto de la compañía irlandesa, quien exigió habérsele informado antes. Según el Ministerio de Defensa neerlandés, los aeropuertos y las aerolíneas recibieron una «notificación internacional» y que Ryanair debió estar enterada.
Con información de AD.