Osterling sostuvo que la reinstauración del sistema bicameral podría contribuir a superar el descrédito y mala percepción que tiene la ciudadanía sobre el legislativo. Indicó que se lograría una mejor representación con un Senado, compuesto por 40 o 50 miembros, elegidos mediante un distrito electoral único; y una Cámara de Diputados, con un mayor número de integrantes y donde estén representadas las regiones.
Anotó que para implementar este sistema no se requeriría de mayor presupuesto, por cuanto con la partida económica que tiene el actual Parlamento se podría sufragar los gastos que demandan la creación de otro órgano legislativo. El también dirigente del Partido Popular Cristiano (PPC) señaló también que se debe insistir en implementar la renovación por tercios de los integrantes del Congreso, así como instituir el voto voluntario.
Sugirió asimismo la eliminación del voto preferencial, por cuanto, añadió, este mecanismo ha permitido que gente poco instruida o sin preparación haya logrado ocupar un lugar en el Congreso. Consideró que el orden en las listas de los candidatos al Parlamento debe ser elaborado por los propios partidos políticos, para lo cual, agregó, tienen que ser exigentes en los requisitos para la selección de sus representantes a esa elección.
Osterling dijo que las organizaciones políticas deben ser “severas” en el control y cumplimiento de estas exigencias para evitar que gente con antecedentes negativos pueda acceder a una curul.
Aeronoticias considera que si bien el ex titular del Senado cuestionó que la imagen y credibilidad del Poder Legislativo se haya visto afectada por hechos lamentables, como el caso de la legisladora Rocío González, sentenciada a cuatro años de prisión condicional por hurto agravado. “Tiene que haber ciertas exigencias, cualquiera no puede llegar al Congreso. Que haya un certificado policial, de antecedentes penales”, manifestó a la agencia Andina.
En otro momento, el ex presidente del Senado opinó que se debería reestructurar el sistema de personal de confianza de los despachos congresales.
Indicó, a modo de ejemplo, que los asistentes o conserjes del Parlamento deben pertenecer al servicio parlamentario y ser distribuidos por bancadas y no individualmente como ocurre actualmente.
