(Aeronoticias).- Hay algo que el Paris Air Show 2013 ha dejado como impresión en los no conocedores de las aviones de transporte aéreo comercial. A su manera, todas las aeronaves se parecen, viniendo de firmas de distintos países, incluso de distintos continentes.
«Mira a todas las aeronaves… se ven exactamente igual (como solían ser -de un modelo a otro-), sólo están usando material distinto», declaró el vicepresidente de ingeniería de AERO Vodochody, Gerrard McCluskey, fabricante aeroespacial checo.
Y es que, como señala el diario USA Today, una de las innovaciones más habladas en el festival Le Bourget se centró en el uso de materiales compuestos. El problema es que, al ojo desnudo, todo se ve igual.
¿Algún modelo innovador en los diseños con cercana proyección industrial? Habrá que regresar al pasado con las aeronaves supersónicas, como lo fue el Concorde. Pero revivir a este tipo de aviones, más allá del riesgo que conlleva, implica una fuerte inversión estatal -como lo fue históricamente- que ningún país al parecer desea seguir. Al menos en una época de combustible al alza.
Con información del USA Today.
