(Aeronoticias): La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) emitió un comunicado instando a los gobiernos a proteger la aviación civil, incluyendo infraestructuras aeroportuarias y de navegación aérea, en tiempos de conflicto.
La organización internacional recordó la importancia de la aviación como una herramienta que trasciende la política y conecta a las personas, citando el preámbulo del Convenio de Chicago, firmado durante la Segunda Guerra Mundial, que destaca el propósito pacífico de la aviación civil.
“La aviación civil cumple un propósito que trasciende la política para ‘crear y preservar la amistad y el entendimiento entre las naciones y los pueblos del mundo’. En el turbulento mundo de 2024, esta verdad resuena con fuerza”, señaló Willie Walsh, director general de la IATA.
Walsh subrayó que la aviación civil no toma partido en conflictos políticos, sino que se basa en la aplicación de normas internacionales para operar de manera segura.
La IATA enfatizó que, en el contexto de un conflicto, es vital que los actores involucrados respeten la seguridad de los vuelos y que las infraestructuras críticas, como los aeropuertos y los servicios de navegación aérea, no sean objetivos de ataques. Esta postura está respaldada por el artículo 13 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que protege la libertad de circulación, y el artículo 48 del IV Convenio de Ginebra, que prohíbe los ataques contra objetivos civiles.
Además, las normas del derecho internacional consuetudinario exigen que todas las partes en un conflicto faciliten el paso de ayuda humanitaria y respeten la libertad de circulación del personal humanitario. La IATA advirtió que cualquier intento de difuminar la línea entre la aviación civil y militar podría tener consecuencias graves para las poblaciones afectadas, en particular para quienes dependen de la asistencia humanitaria.
El Convenio de Chicago también obliga a los Estados a proteger las aeronaves civiles y a abstenerse del uso de la fuerza contra ellas, así como a coordinar cualquier actividad que pueda poner en peligro la seguridad aérea. Esto es esencial para garantizar la seguridad de los pasajeros y las operaciones en zonas de conflicto.
Finalmente, Walsh hizo un llamado a los combatientes a respetar las normas internacionales que protegen a la aviación civil.
“No dañar aeronaves civiles, aeropuertos o servicios de navegación aérea no es negociable y debe respetarse incluso en el punto álgido de la hostilidad”, concluyó el director de la IATA.
Fuente: A21.com.mx