(Aeronoticias).- El director regional de Cultura de Cusco, David Ugarte Vega-Centeno, exigió hoy a las autoridades ediles un manejo responsable del Centro Histórico de la Ciudad Imperial para preservar sus características que la hicieron merecedora del título de Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco.
Dijo, en ese sentido, que la colocación de la estatua de bronce de un supuesto inca en la plaza de Armas de Cusco fue una decisión «arbitraria y unilateral» del alcalde Luis Flórez García, a quien demandó respetar las leyes, normas y reglamentos que protegen el Centro Histórico de la ciudad.
“Hay un Plan Maestro del Centro Histórico de Cusco, aprobado por la municipalidad y el otrora INC, que está vigente. Allí se establece que toda modificación en la plaza de Armas debe ser evaluada y aprobada en forma previa por la Dirección Regional de Cultura. En el caso de la estatua del inca eso nunca sucedió», acotó.
En declaraciones a la Agencia Andina, señaló que desde agosto de 2011 se cursaron cuatro oficios con la petición de retiro, en los cuales se esbozaron argumentos legales y técnicos.
Explicó que en materia legal vulnera las declaratorias de Patrimonio Cultural de la Nación y Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco en 1983, así como la Ley 23765 y el artículo 21 de la Constitución que indica que el Estado tiene la obligación de proteger los bienes culturales.
Vega Ugarte-Centeno citó también al cronista Guaman Poma de Ayala, quien en sus crónicas señala que el inca fue orejón, de cabello corto y que la mascaipacha no es como la que lleva el actual monumento, y menos aún tenía el sol de Echenique en el pecho y en la espalda.
Recordó que en la década del setenta del siglo pasado se abrió un gran debate sobre la posible colocación del monumento de Túpac Amaru en la plaza de Armas, luego del retiro de la estatua de un supuesto piel roja; sin embargo, nunca se pudo hallar consenso en el tema.
Desde que la Unesco reconoció como patrimonio de la humanidad a la ciudad de Cusco, en diciembre de 1983, el Centro Histórico es una zona intangible y la plaza de Armas, que es el núcleo de esa zona, tiene intangibilidad rígida, por tanto nadie puede modificarla sin autorización del Ministerio de Cultura.
El funcionario manifestó que si se pretende colocar algún símbolo o estatua en la plaza de Armas se debe convocar a un gran foro internacional de carácter académico, histórico y técnico para que las instituciones tutelares del patrimonio y los especialistas alcancen una propuesta que sea consensuada con la población.
«Cusco está a la altura de ciudades históricas del mundo como Roma o Jerusalén y ese es el procedimiento correcto si se pretende realizar alguna modificación en la plaza de Armas», puntualizó.
Ugarte indicó que «a través de los medios de comunicación hoy me enteré que el alcalde ha decidido retirar la estatua del inca, yo saludo esa decisión y espero que se me comunique por escrito para que quede constancia de esa rectificación».
(FIN) PHS/JOT
Agencia Andina.