(Aeronoticias).-Con el fin de detener el incremento de la violencia juvenil en el país, evitando de esta manera la desestabilización de los Centros Juveniles que administra este poder del Estado, el Poder Judicial pidió al Congreso de la República la aprobación urgente de los proyectos de ley presentados sobre adolescentes infractores.
Voceros señalaron que, actualmente, los Centros Juveniles albergan 1,615 adolescentes internos, de los cuales 547 son mayores de edad, quienes pueden permanecer internos hasta los 21 años.
“Esta situación origina que los líderes negativos de mayor edad influyan en los menores y los inciten a cometer actos violentos que desestabilizan el normal funcionamiento de los Centros Juveniles y ponen en riesgo la integridad física del personal y de los demás adolescentes”, afirmaron.
Explicaron que las bandas de delincuentes están captando a menores de edad para la comisión de ilícitos, aprovechando que por la condición de su edad sólo se les aplica medidas socioeducativas por un máximo de seis años.
Con el incremento de la violencia juvenil en el país también aumentó el número de adolescentes internos en los citados establecimientos y con perfiles de gran peligrosidad vinculados con organizaciones criminales, integrados por sicarios, extorsionadores, entre otros, acotaron.
“Esta situación hace vulnerable las instalaciones de los Centros Juveniles que no presentan el mismo rigor en cuanto a la seguridad que los Centros Penitenciarios, los cuales cuentan con la presencia de efectivos policiales”, aseveraron.
El Poder Judicial informó que el sábado 13 de abril a las 20:18 horas aproximadamente, fugaron 15 adolescentes del Centro Juvenil de Diagnóstico y Rehabilitación (CJDR) José Quiñones de la ciudad de Chiclayo.
Este hecho ocurrió cuando los evadidos liderados por cinco internos mayores de edad, integrantes de las organizaciones criminales “La gran familia”, “El cholo Isique” y “Las panzonas” redujeron y agredieron físicamente a los educadores sociales y agentes de seguridad que los custodiaban.
Así lograron alcanzar la reja metálica que sirve como esclusa a la puerta principal de ingreso al establecimiento, y accedieron a la vía pública, previa destrucción de las chapas de la puerta.
El director del Centro Juvenil, doctor Adolfo Cachay Sánchez puso en conocimiento de inmediato al Ministerio Público y a la Policía Nacional del Perú para iniciar las investigaciones y recapturar a los internos evadidos, habiéndose recapturado hasta ahora a nueve adolescentes.
El Poder Judicial investiga presuntos actos de corrupción y negligencia de los trabajadores que se encontraban de turno el día de los hechos.