(Aeronoticias).- Rusia puso punto final a la investigación del accidente aéreo del pasado 10 de abril que se cobró la vida del presidente polaco, Lech Kaczinski. El aterrizaje del Tupolev 154 en condiciones inapropiadas se debió a que la tripulación temía que abortar el aterrizaje por la neblina enojara al presidente, dijeron el miércoles funcionarios de aviación rusos.
«Los altos responsables que se encontraban en la cabina, el jefe de la Fuerza Aérea y el jefe del protocolo, ejercieron presión psicológica sobre la tripulación, influyendo en su decisión de aterrizar en malas condiciones meteorológicas», señaló Tatiana Anodina, jefa del Comité intergubernamental de aviación (MAK), que presentó la versión definitiva del informe oficial sobre esa catástrofe.
Durante la publicación de la investigación se reprodujo una grabación de voz de un tripulante mientras el avión se acercaba a Smolensk. «Se enojará», decía el tripulante, en polaco.
Por otro lado, el hermano gemelo del fallecido presidente, Jaroslaw, condenó el informe ruso del accidente como «una broma contra Polonia», que cobró la vida de gran parte del liderazgo político y militar del país, poniendo a prueba los lazos entre Varsovia y su ex patria comunista.
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Asimismo, la documentación informa que uno de los altos cargos que estaba dentro, el jefe de la Fuerza Aérea, general Andrzej Blasik, tenía una cantidad de alcohol de 0,6 mg/l en la sangre. Para llegar a semejante cantidad un hombre que pesa 80 kilos debe consumir aproximadamente un litro de cerveza.
